\u00ab… En la casa de mi Padre muchas moradas hay; si as\u00ed no fuera, yo os lo hubiera dicho; voy, pues, a preparar lugar para vosotros…\u00bb (Juan 14:1-4)<\/p>\n\n\n\n
En v\u00edsperas de la fiesta de la presentaci\u00f3n del Se\u00f1or \u2014la Candelaria\u2014, a las 7:20 de la tarde del 1 de febrero de 1921 naci\u00f3, en la finca marcada con el n\u00famero 678 de la calle 3 del sector Hidalgo de Guadalajara, un ni\u00f1o al que llamaron Francisco Ra\u00fal, noveno hijo del matrimonio de Carlos Villalobos con Mar\u00eda del Refugio Padilla, quienes lo registraron civilmente ocho d\u00edas despu\u00e9s de su alumbramiento.<\/p>\n\n\n\n
Antes de que nacieras te hab\u00eda consagrado (Jr 1:5)<\/strong><\/p>\n\n\n\n A la recepci\u00f3n de las aguas bautismales fue llevado a los 18 d\u00edas de su nacimiento. El sacramento fue efectuado en su parroquia de adscripci\u00f3n, el Sagrario Metropolitano, por la administraci\u00f3n del presb\u00edtero Federico M. L\u00f3pez. Sus padrinos fueron Salvador \u00c1lvarez y su esposa Elvira Alba.<\/p>\n\n\n\n La familia fue numerosa; 13 hijos alegraron el domicilio de un hogar con valores humanos y cristianos de piedad profunda; por ello, la educaci\u00f3n inicial de Francisco Ra\u00fal se llev\u00f3 a cabo en el Colegio Jalisco, en Guadalajara. En el periodo 1928-1929 se distingui\u00f3 como miembro de la selecci\u00f3n de futbol en dicho plantel, por lo que obtuvo constantes preseas. La educaci\u00f3n secundaria la curs\u00f3 con los hermanos maristas, al tiempo en que era miembro asiduo y monaguillo en la Congregaci\u00f3n Mariana.<\/p>\n\n\n\n \u00c1nimo, lev\u00e1ntate; \u00c9l te llama (Mc 10:49)<\/strong><\/p>\n\n\n\n Siendo apenas un infante dio muestras de vocaci\u00f3n al sacerdocio. Seg\u00fan se recuerda de las an\u00e9cdotas familiares, sus juegos le llevaban a so\u00f1ar en ser sacerdote. Su hermana Mar\u00eda Elena le hac\u00eda casullas de papel para \u00abcelebrar misa\u00bb.<\/p>\n\n\n\n Descubiertos los g\u00e9rmenes de su vocaci\u00f3n, despu\u00e9s del primer a\u00f1o de bachillerato que curs\u00f3 con los padres jesuitas, a los 17 a\u00f1os ingres\u00f3 al Seminario Diocesano de Guadalajara, el 9 de noviembre de 1938, al segundo a\u00f1o de preparatoria. Ese a\u00f1o fue el primero de su formaci\u00f3n, donde destac\u00f3 r\u00e1pidamente por su aprovechamiento acad\u00e9mico, especialmente en la asignatura de Lengua Latina, donde obtuvo la m\u00e1xima calificaci\u00f3n y menci\u00f3n de honor.<\/p>\n\n\n\n \u00abSi en el plano de la fe debo descubrir el gozo de haber sido gratuitamente llamado a un servicio de colaboraci\u00f3n, el peso de la responsabilidad me hace vivir en no peque\u00f1a angustia por la magnitud de la misi\u00f3n encomendada\u00bb<\/p><\/blockquote>\n\n\n\n Al a\u00f1o siguiente, en el curso 1939-1940 \u2014tercer a\u00f1o de preparatoria\u2014, obtiene en la mayor\u00eda de sus asignaturas calificaciones m\u00e1ximas y menciones de honor pese a que eran a\u00f1os dif\u00edciles para la formaci\u00f3n sacerdotal en M\u00e9xico, por lo que debi\u00f3 prepararse en el silencio de la clandestinidad. En ese periodo las casas del seminario fueron incautadas. Los seminaristas estudiaban entre correr\u00edas y arreos.<\/p>\n\n\n\n En un informe rectoral de aquellos a\u00f1os, el rector, presb\u00edtero Jos\u00e9 Miguel de Alba, alude al sistema formativo del seminario bajo tales circunstancias: \u00abdonde se crearon peque\u00f1os grupos de estudiantes a cargo de sacerdotes profesores, en los rincones que les fuera posible, para darles formaci\u00f3n a los alumnos\u00bb. El seminarista Francisco Villalobos pas\u00f3 as\u00ed los tres primeros a\u00f1os de su formaci\u00f3n en su propia casa, y asist\u00eda clandestinamente a clases. Fue alumno interno cuando el seminario estuvo ubicado junto al templo de San Jos\u00e9 de Analco, con formadores de la talla de Jos\u00e9 Salazar L\u00f3pez, a la postre cardenal y arzobispo tapat\u00edo; Jos\u00e9 Ru\u00edz Medrano y los padres Jos\u00e9 y Enrique Toral. Del mismo modo, recibi\u00f3 la ense\u00f1anza lit\u00fargica del padre Francisco de Aguinaga, a quien sirvi\u00f3 como monaguillo durante su infancia.<\/p>\n\n\n\n La mayor parte de sus estudios en el seminario fueron sobresalientes, ello le vali\u00f3 ser promovido para cargos relevantes como jefe de redacci\u00f3n de la revista Ap\u00f3stol entre 1945 y 1947, la cual impuls\u00f3 grandemente y revolucion\u00f3 en su edici\u00f3n y formato. Por esas fechas recibi\u00f3 las \u00f3rdenes menores; el 14 de abril de 1946 fue tonsurado y el d\u00eda 18 admitido como ostiario y lector.<\/p>\n\n\n\n Te seguir\u00e9 a dondequiera que vayas (Lc 9:57)<\/strong><\/p>\n\n\n\n En 1947, siendo de \u00f3rdenes menores, fue enviado a Roma \u00abpara beber en la fuente la virtud y la ciencia\u00bb, en compa\u00f1\u00eda de un grupo selecto de seminaristas de su casa de estudios. En el informe rectoral de ese a\u00f1o, el minorista Francisco Villalobos es mencionado como parte del elenco de los seminaristas estudiantes en el extranjero, espec\u00edficamente en el Pontificio Colegio P\u00edo Latino Americano de Roma. En su estancia en la capital italiana logr\u00f3, por medio de la Universidad Gregoriana, la licencia en Teolog\u00eda y en Historia Eclesi\u00e1stica; en esta tambi\u00e9n se doctor\u00f3. En la Ciudad Eterna recibi\u00f3, el 27 de abril de 1948, el subdiaconado, y el 18 de diciembre del mismo a\u00f1o el diaconado.<\/p>\n\n\n\n Como parte de los festejos del jubileo de oro sacerdotal del entonces pont\u00edfice P\u00edo XII, la generaci\u00f3n de 1949 fue consagrada en el orden presbiteral como ofrenda al Santo Padre; 28 de estos neosacerdotes fueron consagrados en Guadalajara, y otros cuatro en la capilla del Colegio P\u00edo Latino-Americano de Roma, entre estos Felipe de Jes\u00fas Campos, Rafael Garc\u00eda, Ignacio Coss y Francisco Ra\u00fal Villalobos Padilla. La ceremonia fue presidida por el obispo de Salto, Uruguay, monse\u00f1or Alfredo Viola. Su primera misa fue cantada en el templo de Nuestra Se\u00f1ora del Carmen.<\/p>\n\n\n\n Por su compromiso en la formaci\u00f3n sacerdotal, fue destinado desde los albores de su ministerio a desempe\u00f1arse como formador en el seminario. Su primera estancia fue como prefecto de latinos, despu\u00e9s como iniciador y director del Instituto de Vocaciones Tard\u00edas; en el periodo 1965-1966 tuvo a su cargo las c\u00e1tedras de Historia Eclesi\u00e1stica, Liturgia, Arte Sagrado y cuestiones sacerdotales; al mismo tiempo cumpl\u00eda el cargo de prefecto de te\u00f3logos y director de la Academia Literaria de Santa Mar\u00eda de Guadalupe y San Juan de la Cruz. En el siguiente curso, 1966-1967, adem\u00e1s de las antedichas asignaturas imparti\u00f3 la materia de Patrolog\u00eda, y en el largo periodo 1959-1968 se le asign\u00f3 el servicio de director de la revista Ap\u00f3stol, cargo que concluy\u00f3 cuando tom\u00f3 las riendas del plantel lev\u00edtico, y en 1968, por disposiciones superiores, recibe el nombramiento de vicerrector del seminario diocesano, como suplente del presb\u00edtero Jes\u00fas Becerra Fern\u00e1ndez.<\/p>\n\n\n\n Seg\u00fan documentos de la Arquidi\u00f3cesis de Guadalajara, en su primer informe rectoral, el padre Villalobos afirmaba que experimentaba \u00abel ansia de declarar que, si en el plano de la fe debo descubrir el gozo de haber sido gratuitamente llamado a un servicio de colaboraci\u00f3n, el peso de la responsabilidad me hace vivir en no peque\u00f1a angustia por la magnitud de la misi\u00f3n encomendada\u00bb.<\/p>\n\n\n\n En Guadalajara, su rectorado fue de corta duraci\u00f3n, tan s\u00f3lo tres a\u00f1os, pero no por ello menos diligentes, pues llev\u00f3 a cabo la aplicaci\u00f3n de las reformas posteriores al Concilio Vaticano II ante seminaristas \u00abdemasiado informados\u00bb y con inquietudes de acabar con todo el pasado, sintiendo que deb\u00eda detener un torrente con las manos. Ante esto, el padre Villalobos supo descifrar los signos de los tiempos y conducir con mano suave, pero con firmeza \u2014suaviter in modo, fortitier in re<\/em>\u2014, a los seminaristas \u00abtambaleantes\u00bb por el tiempo de la transici\u00f3n. Por su cargo en el seminario, Villalobos Padilla era miembro de Iure<\/em> del Consejo Presbiteral de la Arquidi\u00f3cesis.<\/p>\n\n\n\n El buen pastor da la vida por sus ovejas (Jn 10:11)<\/strong><\/p>\n\n\n\n Fue el 9 de mayo de 1971 cuando se anunci\u00f3 en el peri\u00f3dico L\u00b4Osservatore Romano<\/em> que, con la anuencia de S.S. Paulo VI, el padre Francisco Villalobos era manifestado como obispo titular electo de la sede de Columnata y como auxiliar en Saltillo, en el Gobierno de monse\u00f1or Luis Gu\u00edzar y Barrag\u00e1n.<\/p>\n\n\n\n Villalobos Padilla eligi\u00f3 el lema episcopal In Vineam Domini<\/em> \u2014(enviado) a la Vi\u00f1a del Se\u00f1or\u2014, y como escudo un b\u00e1culo en forma de cruz, rodeado por una gu\u00eda de parra, de la que cuelgan hacia dentro, alteradamente, dos racimos de uvas y dos p\u00e1mpanos.<\/p>\n\n\n\n Como parte de los festejos y regocijos por semejante noticia, los seminaristas organizaron una velada literario-musical el 22 de junio de 1971. Era sentir de muchos que, con la exaltaci\u00f3n de su padre rector a la plenitud del sacerdocio, el seminario de Guadalajara sent\u00eda el choque natural de pena y gozo. Pena, por perder a un sacerdote en cuyas manos se avanzaba por el camino de la salvaci\u00f3n; gozo, porque era honrado con una nueva visita del Esp\u00edritu Santo.<\/p>\n\n\n\n La ordenaci\u00f3n episcopal se efectu\u00f3 en la Catedral de Saltillo, bajo la consagraci\u00f3n de monse\u00f1or Gu\u00edzar y Barrag\u00e1n, siendo co-consagrantes el entonces arzobispo Jos\u00e9 Salazar L\u00f3pez, de la arquidi\u00f3cesis tapat\u00eda, y monse\u00f1or Antonio Sahag\u00fan L\u00f3pez, de la di\u00f3cesis de Linares. Adem\u00e1s, se cont\u00f3 con la presencia de monse\u00f1or Carlos Quintero Arce, arzobispo de Hermosillo, a cuyo cargo estuvo la predicaci\u00f3n y que alentaba al nuevo prelado al cumplimiento de su lema episcopal, para ser verdaderamente un enviado a la Vi\u00f1a del Se\u00f1or, \u00aby hacer florecer m\u00e1s esta vi\u00f1a de la Iglesia que en Saltillo produce tan hermosos frutos de santidad y brotes nuevos de esperanza de la renovaci\u00f3n conciliar\u00bb.<\/p>\n\n\n\n Tras un breve periodo de noviciado, de aprendizaje en la toma de las riendas de la grey, por aquiescencia del sumo pont\u00edfice Paulo VI, se otorg\u00f3 la titularidad de la di\u00f3cesis saltillense a monse\u00f1or Villalobos, pues monse\u00f1or Gu\u00edzar ya hab\u00eda sobrepasado la edad can\u00f3nica para dimitir de las funciones de su oficio y su renuncia fue aceptada por el romano pont\u00edfice, de tal modo que Villalobos Padilla recibi\u00f3 el nombramiento de Obispo Titular el 4 de octubre de 1975, d\u00eda en que fue firmada la bula papal, para convertirse en el quinto obispo de esta di\u00f3cesis saltillense.<\/p>\n\n\n\n El 28 de octubre de 1975, monse\u00f1or Gu\u00edzar Barrag\u00e1n le entreg\u00f3 el tim\u00f3n de su Iglesia particular; ese d\u00eda Gu\u00edzar cumpl\u00eda 57 a\u00f1os de sacerdote y, adem\u00e1s, se celebraba el d\u00e9cimo aniversario de la promulgaci\u00f3n del decreto del Concilio Vaticano II sobre el Ministerio Pastoral de los Obispos. Fueron part\u00edcipes de esta celebraci\u00f3n el delegado apost\u00f3lico monse\u00f1or Mario P\u00edo G\u00e1spari; el arzobispo de Monterrey, Manuel Espino, y su obispo auxiliar, J. de Jes\u00fas Tirado; el obispo de Torre\u00f3n, Fernando Romo; el de Tabasco, Rafael Garc\u00eda; el de Matamoros, Sab\u00e1s Maga\u00f1a; el de Tampico, Arturo Zsymasnki; el de Ciudad Victoria, Alfonso Hinojosa; el de Linares, Rafael Gallardo, y el obispo de Corpus Christi, Texas.<\/p>\n\n\n\n La mies es mucha y los obreros pocos (Mt 9:37)<\/strong><\/p>\n\n\n\n En la fecha de la toma de posesi\u00f3n, en un comunicado dirigido a monse\u00f1or Villalobos por parte de la Sagrada Congregaci\u00f3n para los Obispos, se le animaba a \u00abresolver las problem\u00e1ticas diocesanas seg\u00fan las directrices del Concilio Ecum\u00e9nico Vaticano II\u00bb; sin embargo, puntualizaba que \u00abpara resolverlos no basta el n\u00famero de sacerdotes con que contaba la di\u00f3cesis, por ello era necesario, en primer lugar, despertar las vocaciones, cultivarlas y perfeccionarlas por medio de una renovada conciencia diocesana. Este primer servicio de ning\u00fan modo puede ser sustituido\u00bb.<\/p>\n\n\n\n La insuficiencia sacerdotal en Saltillo era un problema evidente que tuvo que irse resolviendo con diligencia. Para 1979, cuatro a\u00f1os despu\u00e9s de la recomendaci\u00f3n de la Congregaci\u00f3n para los Obispos, en la di\u00f3cesis de monse\u00f1or Villalobos hab\u00eda 49 parroquias, de las cuales cinco estaban sin sacerdote. Para solucionarlo, la atenci\u00f3n episcopal se centr\u00f3 en el seminario. Del mismo modo, como hizo en su tiempo de vicerrector en Guadalajara, puso en la mesa de debate la calidad de la formaci\u00f3n de los seminaristas para que pudieran acceder a un t\u00edtulo en este rubro y obtener un certificado reconocido oficialmente; por ello, en 1982 se considera conveniente \u00abque el seminario tenga una secundaria y una preparatoria propias\u00bb. Los esfuerzos del prelado y su equipo de trabajo en las vocaciones sacerdotales se centraron en que la di\u00f3cesis fuera autosuficiente en la formaci\u00f3n de sus futuros sacerdotes; que tuviera los medios para una mejor formaci\u00f3n humana, intelectual y espiritual. Deseaban tambi\u00e9n una instituci\u00f3n donde se formaran las vocaciones adultas. En ese tiempo, los seminaristas mayores pasaban al seminario de Guadalajara o de Monterrey o de San Luis Potos\u00ed a continuar los estudios eclesi\u00e1sticos.<\/p>\n\n\n\n Del mismo modo, en su periodo episcopal en Saltillo se promueve la erecci\u00f3n del Seminario Auxiliar del Sagrado Coraz\u00f3n, con sede en Piedras Negras, con fecha del 20 de julio de 1989. En esa misma fecha se estableci\u00f3 el decreto de la creaci\u00f3n del curso introductorio, que empez\u00f3 con 23 seminaristas en septiembre de dicho a\u00f1o. Ya bien estructurado el Seminario Menor, en diversas reuniones el presbiterio, el obispo y los sacerdotes vieron la conveniencia de que la di\u00f3cesis contara con el Seminario Mayor; el primer paso fue consolidar el filosofado, bajo el nombre de Instituto de Filosof\u00eda Luis Gu\u00edzar Barrag\u00e1n, establecido el 28 de agosto de 1994 con 19 seminaristas, quienes pasaron a residir en las instalaciones del curso introductorio, y este se reubic\u00f3 en una nueva \u00e1rea construida en el Seminario Menor por determinaci\u00f3n del prelado. El 3 de agosto de 1995, en el 24 aniversario episcopal del se\u00f1or Villalobos, como parte de sus festejos se coloc\u00f3 la primera piedra del edificio del filosofado, que se constituir\u00eda como el Seminario Mayor, el cual qued\u00f3 concluido en tiempo r\u00e9cord el 26 de julio de 1996, fecha en que fue bendecido y ocupado por 60 alumnos, adelantando brevemente con este acontecimiento los festejos por las bodas de plata episcopales del querido obispo.<\/p>\n\n\n\n El coraz\u00f3n del pastor se alegraba, ahora era m\u00e1s factible resolver la falta de vocaciones y constituir una formaci\u00f3n completa para los levitas de su Iglesia particular. Otros elementos destacables durante su Gobierno consisten en la amplia apertura que dio al trabajo de colaboraci\u00f3n pastoral con las \u00f3rdenes religiosas, el impulso al protagonismo de los laicos en la pastoral y la formaci\u00f3n catequ\u00e9tica para el crecimiento en la fe y la vida cristiana.<\/p>\n\n\n\n Fue durante la administraci\u00f3n de monse\u00f1or Villalobos que el 23 de junio de 1991 se celebr\u00f3 el centenario de la erecci\u00f3n de la di\u00f3cesis saltillense, evento en el que participaron miles de fieles congregados en su entorno.<\/p>\n\n\n\n Se\u00f1or, est\u00e1 bien que nos quedemos aqu\u00ed (Mt 17:4)<\/strong><\/p>\n\n\n\n Despu\u00e9s de un largo periodo de desempe\u00f1o pastoral en la \u00fanica di\u00f3cesis a su cargo, de establecer numerosas parroquias, y velar incansablemente por su seminario, a llegar a la edad can\u00f3nica, en el a\u00f1o de 1996 present\u00f3 la solicitud de la dimisi\u00f3n a sus oficios episcopales, la cual le fue aceptada hasta cuatro a\u00f1os despu\u00e9s, en v\u00edsperas del tercer milenio, el 31 de diciembre de 1999.<\/p>\n\n\n\n El 19 de marzo del 2000, en la solemnidad del se\u00f1or San Jos\u00e9, monse\u00f1or Villalobos prepar\u00f3 una gran bienvenida para su sucesor, que ser\u00eda monse\u00f1or Ra\u00fal Vera L\u00f3pez, OP, quien tomar\u00eda posesi\u00f3n can\u00f3nica de su sede episcopal al d\u00eda siguiente, 20 de marzo. Tras casi 29 a\u00f1os como pastor de Saltillo, y casi 25 de ellos como titular, monse\u00f1or Villalobos se convirti\u00f3 en pastor em\u00e9rito de esta di\u00f3cesis norte\u00f1a, avecind\u00e1ndose en este terru\u00f1o que ocup\u00f3 un lugar preferente de su coraz\u00f3n de pastor, y donde sostuvo una vida recatada, discreta y edificante.<\/p>\n\n\n\n Como obispo em\u00e9rito, no dej\u00f3 de celebrar la Santa Misa y de atender fielmente a quienes lo solicitaban, testimonio confirmado en medio de las contrariedades pand\u00e9micas de COVID-19. A las 19 horas del d\u00eda 6 de enero de 2021, frente a la comunidad de te\u00f3logos del Seminario Mayor, monse\u00f1or Villalobos se present\u00f3, pr\u00e1cticamente en v\u00edsperas del centenario de su nacimiento, y presidi\u00f3 la Eucarist\u00eda a\u00fan en plenitud.<\/p>\n\n\n\n Retorno a la Casa del Padre (Jn 14:1)<\/strong><\/p>\n\n\n\n El lunes 1 de febrero del 2021, con una misa a puerta cerrada en la Catedral de Saltillo para evitar los riesgos sanitarios por coronavirus, se dieron las gracias por su aniversario 100 de vida, ceremonia en que le asistieron el nuevo obispo titular Hilario Gonz\u00e1lez Garc\u00eda \u2014en ese momento reci\u00e9n llegado\u2014, y el tambi\u00e9n em\u00e9rito fray Ra\u00fal Vera L\u00f3pez, OP. En 2021 celebr\u00f3 tambi\u00e9n 50 a\u00f1os de consagraci\u00f3n episcopal.<\/p>\n\n\n\n A lo largo de ese a\u00f1o, con una lucidez que nunca perdi\u00f3 y consciente de encontrarse en el atardecer de su existencia, Villalobos se dio la oportunidad, cuantas veces pudo, de manifestar su gratitud a la feligres\u00eda de una di\u00f3cesis que lo abraz\u00f3 con calidez, que le reconoci\u00f3 su firmeza de car\u00e1cter para alcanzar objetivos, as\u00ed como su calidad de disciplinado y prudente, misma feligres\u00eda que vio siempre en \u00e9l a un \u00abpadre bueno\u00bb.<\/p>\n\n\n\n Al final, tras gozar de un a\u00f1o m\u00e1s de vida, tristemente tan solo dos d\u00edas despu\u00e9s de su aniversario 101, monse\u00f1or Francisco Ra\u00fal Villalobos Padilla perdi\u00f3 la batalla contra un contagio de COVID-19, la peste del siglo. El jueves 3 de febrero de 2022 dej\u00f3 este plano existencial para regresar a la Casa del Padre. E4<\/strong><\/p>\n","protected":false},"excerpt":{"rendered":"\u00ab… En la casa de mi Padre muchas moradas hay; si as\u00ed no fuera, yo os lo hubiera dicho; voy, pues, a preparar lugar para vosotros…\u00bb (Juan 14:1-4)\n [...]<\/a>","protected":false},"author":5,"featured_media":3982,"comment_status":"open","ping_status":"open","sticky":false,"template":"","format":"standard","meta":{"_mi_skip_tracking":false,"_exactmetrics_sitenote_active":false,"_exactmetrics_sitenote_note":"","_exactmetrics_sitenote_category":0,"footnotes":""},"categories":[38],"tags":[],"jetpack_sharing_enabled":true,"jetpack_featured_media_url":"https:\/\/espacio4.mx\/wp-content\/uploads\/2022\/02\/22-VILLA-6.jpg","_links":{"self":[{"href":"https:\/\/espacio4.mx\/wp-json\/wp\/v2\/posts\/4009"}],"collection":[{"href":"https:\/\/espacio4.mx\/wp-json\/wp\/v2\/posts"}],"about":[{"href":"https:\/\/espacio4.mx\/wp-json\/wp\/v2\/types\/post"}],"author":[{"embeddable":true,"href":"https:\/\/espacio4.mx\/wp-json\/wp\/v2\/users\/5"}],"replies":[{"embeddable":true,"href":"https:\/\/espacio4.mx\/wp-json\/wp\/v2\/comments?post=4009"}],"version-history":[{"count":2,"href":"https:\/\/espacio4.mx\/wp-json\/wp\/v2\/posts\/4009\/revisions"}],"predecessor-version":[{"id":4012,"href":"https:\/\/espacio4.mx\/wp-json\/wp\/v2\/posts\/4009\/revisions\/4012"}],"wp:featuredmedia":[{"embeddable":true,"href":"https:\/\/espacio4.mx\/wp-json\/wp\/v2\/media\/3982"}],"wp:attachment":[{"href":"https:\/\/espacio4.mx\/wp-json\/wp\/v2\/media?parent=4009"}],"wp:term":[{"taxonomy":"category","embeddable":true,"href":"https:\/\/espacio4.mx\/wp-json\/wp\/v2\/categories?post=4009"},{"taxonomy":"post_tag","embeddable":true,"href":"https:\/\/espacio4.mx\/wp-json\/wp\/v2\/tags?post=4009"}],"curies":[{"name":"wp","href":"https:\/\/api.w.org\/{rel}","templated":true}]}}