{"id":4276,"date":"2022-04-05T12:57:09","date_gmt":"2022-04-05T17:57:09","guid":{"rendered":"https:\/\/espacio4.mx\/?p=4276"},"modified":"2022-04-10T13:01:57","modified_gmt":"2022-04-10T18:01:57","slug":"engrudo-digital","status":"publish","type":"post","link":"https:\/\/espacio4.mx\/engrudo-digital\/","title":{"rendered":"Engrudo digital"},"content":{"rendered":"\n

La tecnolog\u00eda nos ha permitido superar escollos culturales como la tramitolog\u00eda y la burocracia, pilares del v\u00eda crucis que (casi) todo mexicano del siglo pasado sab\u00eda enfrentar con estoicismo. Los j\u00f3venes de hoy, acostumbrados a solucionar la falta de hielo en una fiesta con deslizar el dedo por una pantalla de su tel\u00e9fono, poco saben de expresiones como \u00abpase a verificaciones a que le sellen la constancia, y regresa\u00bb; para que, una vez con la ansiada marca, el se\u00f1or de la ventanilla remate: \u00abfalt\u00f3 que le firmaran el oficio, pero eso es en Pensiones\u00bb. Horas perdidas, filas interminables y frustraciones ten\u00edan remedio: como todo sistema crea su ant\u00eddoto, los facilitadores o \u00abcoyotes\u00bb promet\u00edan tr\u00e1mites sin dolor.<\/p>\n\n\n\n

La digitalizaci\u00f3n de la vida ha modificado la forma en la que hacemos pagos o solicitamos una copia oficial del acta de nacimiento. Ir a una sucursal bancaria empieza a convertirse en algo excepcional. Lo que antes era una relaci\u00f3n con un ejecutivo, ahora es una rutina con botones en un cajero autom\u00e1tico o en una aplicaci\u00f3n del celular. La pandemia elimin\u00f3, en buena medida, las oficinas donde parec\u00eda que a todos se nos hab\u00eda ocurrido renovar la licencia de manejar el mismo d\u00eda. Llegaron las citas digitales para demostrarnos que incluso el orden y el espacio vac\u00edo pueden ser mexicanos.<\/p>\n\n\n\n

Como cualquier medicamento, los nuevos remedios no est\u00e1n exentos de potenciales da\u00f1os colaterales. Los tr\u00e1mites contempor\u00e1neos ya no implican discutir con la se\u00f1orita de la ventanilla, ahora nos peleamos con el sistema. Pantallas que no se despliegan, por saturaci\u00f3n y falta de capacidad, son el equivalente a aquellas oficinas donde hab\u00eda ocho ventanillas, pero s\u00f3lo en dos atend\u00edan. Procesos p\u00e9simamente se\u00f1alados hacen que tardemos en descubrir que nos faltaba marcar ese recuadro min\u00fasculo donde aceptamos t\u00e9rminos y condiciones. Aunque ya no tenemos que ir de piso en piso, ahora marcamos las im\u00e1genes donde aparecen sem\u00e1foros para demostrar que no somos robots<\/em>.<\/p>\n\n\n\n

Menci\u00f3n aparte merece un tr\u00e1mite de todo mexicano que paga impuestos: \u00absacar\u00bb facturas, que equivale a solicitar la expedici\u00f3n digital que oficializa un gasto (con la remota esperanza de que sea deducible). Como los diferentes comercios no tienen la obligaci\u00f3n de homologar sistemas y procesos, uno termina con varios comprobantes de compra o \u00abtickets\u00bb en los cuales est\u00e1n las instrucciones para solicitar la factura v\u00eda internet. Y cada uno es una aventura distinta. Uno de los primeros retos consiste en convertirse en lector de jerogl\u00edficos. Como el comprobante es pr\u00e1cticamente ilegible por falta de tinta \u2014y uno no se percat\u00f3 en el momento de recibirlo\u2014, usamos lupas o fotografiamos el papel con la esperanza de descifrar si aquello es un 8 o la letra B.<\/p>\n\n\n\n

Raras son las empresas donde su proceso para generar facturas es claro, fluido e intuitivo para el cliente. Lo que hoy se llama \u00abexperiencia del usuario\u00bb es un proceso que deber\u00eda aplicarse con este tipo de tr\u00e1mites, para sensibilizar a los programadores y que se den cuenta de que aquello que es obvio para ellos, no lo es para un mortal com\u00fan y corriente.<\/p>\n\n\n\n

Aun suponiendo que nuestro comprobante de compra es legible, sobreviene uno de los momentos culminantes: encontrar (primero) y escribir (despu\u00e9s) el \u00abn\u00famero de referencia\u00bb o \u00abde operaci\u00f3n\u00bb o \u00abde c\u00f3digo\u00bb o de cualquier otro nombre que arbitrariamente se le d\u00e9, y que en el mejor de los casos consta de menos de 10 d\u00edgitos, pero casi siempre es de m\u00e1s de 20 y adem\u00e1s combina caracteres alfanum\u00e9ricos, que luego deben ser completados con otro recuadro verificador donde hay que transcribir el \u00abn\u00famero de ticket\u00bb o \u00abfecha de operaci\u00f3n\u00bb o incluso \u00abla hora\u00bb, y todo aquello, a modo de pistas escondidas, en un pedacito de papel que uno analiza como si fuera un ejemplar incunable; para que luego de presionar el bot\u00f3n \u00abgenerar factura\u00bb, nos aparezca una leyenda (si es que el ingeniero en sistemas tuvo la delicadeza): \u00abn\u00famero de referencia no existe\u00bb o simplemente no pase nada, mientras uno ah\u00ed, frente a la soledad del ciberespacio, sin ning\u00fan \u00abpoli\u00bb a quien preguntarle por una pista, intenta ingresar de nuevo aquel largu\u00edsimo c\u00f3digo, con la esperanza de no equivocarse.<\/p>\n\n\n\n

Vivimos la ilusi\u00f3n de los tr\u00e1mites que avanzan \u00e1gilmente, el se\u00f1or de la ventanilla vive secretamente en un teclado.<\/p>\n\n\n\n

Fuente: Reforma<\/em><\/p>\n","protected":false},"excerpt":{"rendered":"La tecnolog\u00eda nos ha permitido superar escollos culturales como la tramitolog\u00eda y la burocracia, pilares del v\u00eda crucis que (casi) todo mexicano del \n [...]<\/a>","protected":false},"author":7,"featured_media":0,"comment_status":"open","ping_status":"open","sticky":false,"template":"","format":"standard","meta":{"_mi_skip_tracking":false,"_exactmetrics_sitenote_active":false,"_exactmetrics_sitenote_note":"","_exactmetrics_sitenote_category":0,"_jetpack_memberships_contains_paid_content":false,"footnotes":""},"categories":[10],"tags":[],"jetpack_sharing_enabled":true,"jetpack_featured_media_url":"","_links":{"self":[{"href":"https:\/\/espacio4.mx\/wp-json\/wp\/v2\/posts\/4276"}],"collection":[{"href":"https:\/\/espacio4.mx\/wp-json\/wp\/v2\/posts"}],"about":[{"href":"https:\/\/espacio4.mx\/wp-json\/wp\/v2\/types\/post"}],"author":[{"embeddable":true,"href":"https:\/\/espacio4.mx\/wp-json\/wp\/v2\/users\/7"}],"replies":[{"embeddable":true,"href":"https:\/\/espacio4.mx\/wp-json\/wp\/v2\/comments?post=4276"}],"version-history":[{"count":1,"href":"https:\/\/espacio4.mx\/wp-json\/wp\/v2\/posts\/4276\/revisions"}],"predecessor-version":[{"id":4277,"href":"https:\/\/espacio4.mx\/wp-json\/wp\/v2\/posts\/4276\/revisions\/4277"}],"wp:attachment":[{"href":"https:\/\/espacio4.mx\/wp-json\/wp\/v2\/media?parent=4276"}],"wp:term":[{"taxonomy":"category","embeddable":true,"href":"https:\/\/espacio4.mx\/wp-json\/wp\/v2\/categories?post=4276"},{"taxonomy":"post_tag","embeddable":true,"href":"https:\/\/espacio4.mx\/wp-json\/wp\/v2\/tags?post=4276"}],"curies":[{"name":"wp","href":"https:\/\/api.w.org\/{rel}","templated":true}]}}