{"id":5761,"date":"2022-11-14T22:55:36","date_gmt":"2022-11-15T04:55:36","guid":{"rendered":"https:\/\/espacio4.mx\/?p=5761"},"modified":"2022-11-30T12:26:38","modified_gmt":"2022-11-30T18:26:38","slug":"mi-viejo-un-tipazo","status":"publish","type":"post","link":"https:\/\/espacio4.mx\/mi-viejo-un-tipazo\/","title":{"rendered":"Mi viejo, un tipazo"},"content":{"rendered":"\n

Federico S\u00e1enz Negrete<\/p>\n\n\n\n

Hasta pronto, Gilberto<\/a><\/strong><\/p>\n\n\n\n

Los sonidos empiezan a distinguirse conforme clarea el d\u00eda. El fr\u00edo arrecia al m\u00e1ximo justo antes de salir el sol y arroja desesperado al aire sus \u00faltimos dardos. Todo empieza a recuperar su color. Una suave brisa tibia anuncia que el d\u00eda ha tomado el control sobre la noche. Las \u00faltimas estrellas, las que resistieron hasta el final, se retiran de la escena resguardando intacta su luminosidad para el pr\u00f3ximo combate. Todo parece estar quieto cuando ya se entretejen las resilientes telara\u00f1as de la subsistencia.<\/p>\n\n\n\n

Es entonces cuando mi padre me voltea a ver y se pone de pie invit\u00e1ndome a tomar el control de mi parcela con un gui\u00f1o c\u00f3mplice.<\/p>\n\n\n\n

Recuerdo ese bello momento en la primera cacer\u00eda de gansos que me llev\u00f3 a los ocho a\u00f1os.<\/p>\n\n\n\n

Cualquier jornada inicia llena de significados, cargada de claves insondables que nos toca aceptar e intentar descifrarlas con mucho ah\u00ednco, pero sin obsesi\u00f3n. La vida contin\u00faa. Lo que vemos como tropezones no es sino el eterno fluir acompasado entre el d\u00eda y la noche, entre la vida y la trascendencia.<\/p>\n\n\n\n

Mortales enamorados de nuestra circunstancia, engre\u00eddos por nuestros logros, animados por nuestros peque\u00f1os triunfos, olvidamos que no somos esto que aparentamos sino un peque\u00f1o destello del todo embarcado en una maravillosa, fr\u00e1gil, ef\u00edmera y hermosa experiencia terrena.<\/p>\n\n\n\n

Con la plenitud de haber paladeado la corporeidad, con el gozo de haber caminado pisando a plenitud la hierba escarchada de roc\u00edo, enfrentamos el retorno a nuestra esencia despoj\u00e1ndonos de estas carnes que se tornan obsoletas e inoperantes.<\/p>\n\n\n\n

Querido padre:<\/strong><\/p>\n\n\n\n

Me quedo con tu capacidad de reorganizarte, con tu aceptaci\u00f3n del destino, con tu decisi\u00f3n de defender a capa y espada lo b\u00e1sico viendo c\u00f3mo se hunde lo ef\u00edmero y superfluo, con la consciencia de que habr\u00e1 tiempo, voluntad y empe\u00f1o para recuperar terreno. Las estrategias aprendidas en tu juventud militar y de f\u00fatbol americano te marcaron por siempre.<\/p>\n\n\n\n

Pero sobre todo, me quedo con tu fe, tu firme e inquebrantable fe que compartes con tus tres hermanas. Ese m\u00e1stil s\u00f3lido que te mantuvo atado a la realidad mientras tu mente vol\u00f3 por la inmensidad de los proyectos que apoyaste imprimiendo siempre tu enjundia, tu sentido pr\u00e1ctico, tu altura de miras y en los que no buscaste m\u00e1s protagonismo que el que era necesario para promover, explicar e inspirar a tus semejantes. Esa fe que te mantuvo de una pieza cuando la vida tuvo a bien probar tu temple exponi\u00e9ndote a las peores tormentas en aguas inh\u00f3spitas, a las m\u00e1s cerradas tolvaneras en tierra qued\u00e1ndote s\u00f3lo a mitad del desierto sin m\u00e1s br\u00fajula que las estrellas, sin m\u00e1s consuelo que la esperanza de un nuevo d\u00eda.<\/p>\n\n\n\n

Aqu\u00ed estamos pues, viejo soldado, joven cadete Federico Juan S\u00e1enz Larriva que parti\u00f3 de Torre\u00f3n para completar en Los \u00c1ngeles, California, la primaria, la secundaria y la preparatoria gradu\u00e1ndose en la Loyola High School, una instituci\u00f3n militar administrada por jesuitas con apoyo del ej\u00e9rcito. Te graduaste el segundo en el ranking<\/em>, el segundo en la l\u00ednea de mando.<\/p>\n\n\n\n

Tu paso por el Tec de Monterrey, tu entrega a tu oficio de vendedor de autos que ejerciste durante 65 a\u00f1os, tu afici\u00f3n a la cacer\u00eda que manten\u00eda tu v\u00ednculo amoroso con la naturaleza, hoy tan incomprendida, y tu incre\u00edble liderazgo en la Asociaci\u00f3n de Distribuidores Chrysler cuyo puesto de presidente honorario vitalicio ha quedado vacante. En 1970 fuiste el primer presidente de provincia. Armaste tal equipo de \u00abb\u00e1rbaros del Norte\u00bb que las sucesivas presidencias han quedado ya en manos de representantes de todo el pa\u00eds.<\/p>\n\n\n\n

Valoro enormemente hayas resistido esos memorables diez minutos cuando tus colegas de pie en la Convenci\u00f3n Anual te ped\u00edan que aceptaras la tercera reelecci\u00f3n. Con gran entereza les comunicaste que le hab\u00edas prometido a un ni\u00f1o de 12 a\u00f1os, yo mero, que ya no faltar\u00edas a las diarias sesiones de \u00abcachados\u00bb con las que guante de b\u00e9isbol en mano, emul\u00e1bamos a nuestros \u00eddolos del Uni\u00f3n Laguna.<\/p>\n\n\n\n

Junto con mi madre, tu esposa, defendiste con tu vida una familia de seis hijos, este que habla y cinco admirables hermanas que crecieron sabedoras de su inquebrantable val\u00eda.<\/p>\n\n\n\n

Siguiendo tu ejemplo, form\u00e9 una s\u00f3lida familia junto a la mujer que recorrer\u00eda el planeta para volver a encontrarla. La vida me bendijo con una hija y dos hijos a los que entregu\u00e9 mi tiempo y lo mejor de m\u00ed en su infancia y as\u00ed como t\u00fa me dijiste que te sent\u00edas muy orgulloso de que yo fuese mejor que t\u00fa, te gan\u00f3 la generosidad, yo s\u00ed te puedo informar que tus nietos, mis hijos, son mejores que yo. Mis tres nietos est\u00e1n enterados y son testigos de que tienen en don Felelico y en In\u00e9s Negrete a unos entra\u00f1ables bisabuelos.<\/p>\n\n\n\n

Te acompa\u00f1\u00e9 en innumerables batallas de todo tipo. Cargo en mis alforjas la experiencia y la sabidur\u00eda de haber escuchado desde muy ni\u00f1o los argumentos de los adultos. Escuch\u00e9 siempre antes de hablar, pero me ense\u00f1aste que hab\u00eda que hablar claro y fuerte cuando fuese menester.<\/p>\n\n\n\n

De ti y de mi abuelo escuche que La Laguna era una unidad, est\u00fapida y artificialmente dividida en dos, y que tarde que temprano la fuerza de la realidad terminar\u00eda por imponerse logrando el Estado de La Laguna para beneficio de nuestra patria mexicana.<\/p>\n\n\n\n

Me ense\u00f1aste que en la limitaci\u00f3n de los deseos estriba el inicio de la felicidad pero que hab\u00eda que esforzarse a diario, al m\u00e1ximo, con planeaci\u00f3n e inteligencia.<\/p>\n\n\n\n

Que a veces la vida te propina reveses muchos y muy fuertes, reveses que destruyen, que aniquilan a otros, pero no a ti. Que hab\u00eda que mantenerse erguido ante la tolvanera que terminar\u00e1 tarde que temprano por perder fuerza y que siempre habr\u00e1 espacio para reconstruir lo perdido demostrando a tus semejantes que tu ca\u00edda, o tu incumplimiento, no fue ni por maldad ni por intenci\u00f3n desviada sino simplemente porque intentaste algo m\u00e1s all\u00e1 de tus posibilidades.<\/p>\n\n\n\n

Siempre es posible volver a empezar y todo mundo merece una segunda y hasta una tercera oportunidad.<\/p>\n\n\n\n

As\u00ed que, con un respetuoso saludo militar, te despido. Abrazo la oraci\u00f3n que tanto amaste \u2014\u00abHazme un instrumento de tu paz\u00bb\u2014 y que recibo como mi mayor herencia.<\/p>\n\n\n\n

T\u00fa que fuiste tan bien definido por la directora del St John\u2019s Academy en la carta donde te recomendaba para ingresar en Loyola. \u00abUn l\u00edder deportivo y militar de la m\u00e1s alta clase y un espl\u00e9ndido y caballeroso joven cat\u00f3lico\u00bb.<\/p>\n\n\n\n

Vete en paz, estoico caballero que supiste deleitarte en cualquier situaci\u00f3n tanto en la abundancia como en la estrechez.<\/p>\n\n\n\n

Vete con Dios. Los que permanecemos en esta po\u00e9tica y maravillosa lucha tendremos siempre en cuenta que la noche es m\u00e1s oscura cuando est\u00e1 a punto de salir el Sol.<\/p>\n\n\n\n

Misi\u00f3n cumplida, querido pap\u00e1.<\/p>\n\n\n\n

Hasta pronto.<\/p>\n\n\n\n

*Texto dedicado al destacado empresario lagunero Federico Juan S\u00e1enz Larriva, fallecido el 27 de septiembre de 2022.<\/em><\/p>\n\n\n\n


\n\n\n\n

Hasta pronto, Gilberto<\/p>\n\n\n\n

Adi\u00f3s Gilberto, hasta pronto.<\/p>\n\n\n\n

 Qu\u00e9 breve y apresurado momento para agradecer tu inteligencia, tu sabidur\u00eda, tu calidez, tu entusiasmo, tu humilde grandeza, tu grandeza humilde.<\/p>\n\n\n\n

Compartir contigo un trago era asistir al desfile del conocimiento, al malabarismo de las ideas, al c\u00f3ctel de las an\u00e9cdotas, al inagotable gozo de las posibilidades abiertas, al eterno instante del recuerdo.<\/p>\n\n\n\n

Gracias por la hermandad que nos dejas. De pronto, una cauda de hombres y mujeres de tu tierra, nuestra querida Comarca, nos descubrimos hermanos en un enorme dolor por tu ausencia, en una fraterna convivencia con tu gigantesco legado.<\/p>\n\n\n\n

Cu\u00e1nto talento se teji\u00f3 a tu alrededor, la lista de los dolientes me ha dejado embelesado con el recuento del tama\u00f1o de los que te lloran. La gente que tanto admiro habla de ti con una sinceridad conmovedora. \u00bfQu\u00e9 tiene esta tierra para que nazcan aqu\u00ed personas tan valiosas?<\/p>\n\n\n\n

\u00bfSer\u00e1 el infinito horizonte que no limita o la perenne sequ\u00eda que obliga al esfuerzo decidido y muchas veces, por desgracia, a emigrar siempre con la idea de volver alg\u00fan d\u00eda? Es esta incertidumbre del futuro que nos obliga a estirar la mano para ara\u00f1ar la saliente y escalar otra roca con entusiasta estoicismo.<\/p>\n\n\n\n

Qu\u00e9 enorme hueco nos dejas querido amigo, qu\u00e9 silencio va a rodear tu ausencia. Extra\u00f1aremos tu extenso universo, incre\u00edble amalgama de conocimientos que compart\u00edas en cada pl\u00e1tica plena de variopinta y gozosa constelaci\u00f3n de ideas.<\/p>\n\n\n\n

Gracias Gilberto por esta breve oportunidad de convivir con tu grandeza, tan fr\u00e1gil, tan humana, tan cercana y fraterna.<\/p>\n\n\n\n

Los atardeceres laguneros ser\u00e1n a\u00fan m\u00e1s rabiosos pues un nuevo hortelano se reintegra al Jard\u00edn del Eterno en donde ella le espera.<\/p>\n","protected":false},"excerpt":{"rendered":"Federico S\u00e1enz Negrete Hasta pronto, Gilberto Los sonidos empiezan a distinguirse conforme clarea el d\u00eda. El fr\u00edo arrecia al m\u00e1ximo justo antes de \n [...]<\/a>","protected":false},"author":118,"featured_media":5734,"comment_status":"open","ping_status":"open","sticky":false,"template":"","format":"standard","meta":{"_mi_skip_tracking":false,"_exactmetrics_sitenote_active":false,"_exactmetrics_sitenote_note":"","_exactmetrics_sitenote_category":0,"footnotes":""},"categories":[34],"tags":[],"jetpack_sharing_enabled":true,"jetpack_featured_media_url":"https:\/\/espacio4.mx\/wp-content\/uploads\/2022\/11\/27-Larriva.jpg","_links":{"self":[{"href":"https:\/\/espacio4.mx\/wp-json\/wp\/v2\/posts\/5761"}],"collection":[{"href":"https:\/\/espacio4.mx\/wp-json\/wp\/v2\/posts"}],"about":[{"href":"https:\/\/espacio4.mx\/wp-json\/wp\/v2\/types\/post"}],"author":[{"embeddable":true,"href":"https:\/\/espacio4.mx\/wp-json\/wp\/v2\/users\/118"}],"replies":[{"embeddable":true,"href":"https:\/\/espacio4.mx\/wp-json\/wp\/v2\/comments?post=5761"}],"version-history":[{"count":1,"href":"https:\/\/espacio4.mx\/wp-json\/wp\/v2\/posts\/5761\/revisions"}],"predecessor-version":[{"id":5762,"href":"https:\/\/espacio4.mx\/wp-json\/wp\/v2\/posts\/5761\/revisions\/5762"}],"wp:featuredmedia":[{"embeddable":true,"href":"https:\/\/espacio4.mx\/wp-json\/wp\/v2\/media\/5734"}],"wp:attachment":[{"href":"https:\/\/espacio4.mx\/wp-json\/wp\/v2\/media?parent=5761"}],"wp:term":[{"taxonomy":"category","embeddable":true,"href":"https:\/\/espacio4.mx\/wp-json\/wp\/v2\/categories?post=5761"},{"taxonomy":"post_tag","embeddable":true,"href":"https:\/\/espacio4.mx\/wp-json\/wp\/v2\/tags?post=5761"}],"curies":[{"name":"wp","href":"https:\/\/api.w.org\/{rel}","templated":true}]}}