{"id":9603,"date":"2024-06-11T10:10:00","date_gmt":"2024-06-11T16:10:00","guid":{"rendered":"https:\/\/espacio4.mx\/?p=9603"},"modified":"2024-06-11T10:10:00","modified_gmt":"2024-06-11T16:10:00","slug":"ya-basta","status":"publish","type":"post","link":"https:\/\/espacio4.mx\/ya-basta\/","title":{"rendered":"Ya basta"},"content":{"rendered":"\n

De nueva cuenta, como en otras ocasiones, escribo este art\u00edculo a unas cuantas horas de que los procesos electorales nos entreguen en M\u00e9xico figuras de gobernanza distintas de las que hoy se mantienen, con m\u00e1s pena que gloria, en el escenario pol\u00edtico del pa\u00eds.<\/p>\n\n\n\n

Mantengo, sin embargo, un pesimismo que me pone muy cerca del abismo. No lo veo como algo positivo; m\u00e1s bien lo considero una tragedia de dimensiones apocal\u00edpticas para la estabilidad y la sobrevivencia de la naci\u00f3n.<\/p>\n\n\n\n

El resultado no cambiar\u00e1 ni el sentido ni la intenci\u00f3n de la presente entrega period\u00edstica. Pero este acto que debiera ser positivamente c\u00edvico e imprescindible para la democracia mexicana me convoca a reflexionar una vez m\u00e1s en torno a esos recept\u00e1culos del mal, llamados partidos pol\u00edticos, y que tanto da\u00f1o han causado a la vida ciudadana de M\u00e9xico.<\/p>\n\n\n\n

Son recept\u00e1culos del mal porque, hist\u00f3ricamente los Gobiernos mexicanos emanados de ellos han dado origen a una burocracia rapaz que arropa, forma y promueve a una casta parasitaria que usa su membrec\u00eda como una patente de corso en contra de una masa informe, indefensa y miserable que se halla a su merced: el pueblo.<\/p>\n\n\n\n

La norma ha sido el otorgamiento de cargos a cambio de fidelidades mal entendidas y favores comprometedores, una pr\u00e1ctica de compraventa donde el enriquecimiento inmediato, inveros\u00edmil e inusual, es la primera meta. Es decir, corrupci\u00f3n.<\/p>\n\n\n\n

Los partidos pol\u00edticos crearon un monstruoso pulular de personajes est\u00e9riles, con una vocaci\u00f3n irrefrenable de par\u00e1sito: los pol\u00edticos, formando una interminable lista de aspirantes a puestos p\u00fablicos que les ofrece la garant\u00eda de un futuro prometedor: diputados federales, senadores de la Rep\u00fablica, diputados locales, gobernadores, alcaldes, regidores, secretarios de estado, subsecretarios, asesores, secretarios privados, directores de \u00e1rea, jefes de departamento, delegados, servidores de la naci\u00f3n\u2026 Basura eterna decidiendo por todos.<\/p>\n\n\n\n

En M\u00e9xico los partidos pol\u00edticos constituyen el m\u00e1s grande y eficaz movimiento organizado que ha provocado la muerte civil del pa\u00eds entero. S\u00f3lo de sus filas salen los gobernantes que han clausurado todas las formas de expresi\u00f3n de la vida ciudadana. Obligado por las circunstancias, el individuo de esa sociedad s\u00f3lo hace lo que ellos le piden hacer: su aclamaci\u00f3n p\u00fablica a trav\u00e9s de los procesos electorales y una sumisi\u00f3n insultante revestida de lealtad, recompensada m\u00e1s tarde a trav\u00e9s de un programa social de car\u00e1cter clientelar.<\/p>\n\n\n\n

Los partidos pol\u00edticos han encontrado en la democracia su mejor justificaci\u00f3n para actuar de la manera m\u00e1s irresponsable frente a los problemas vitales de la naci\u00f3n.<\/p>\n\n\n\n

Convertidos en Gobierno, ya sin la m\u00e1scara que utilizan durante las campa\u00f1as electorales para ocultar su verdadero rostro, muy pronto dan muestra de la verdad de su faz: mediocridad, esterilidad, perversidad, alcahueter\u00eda, solapadores, convenencieros, manipuladores, ma\u00f1osos, enga\u00f1adores, oportunistas, usurpadores, arribistas, ladrones, criminales\u2026 El mal en toda su expresi\u00f3n.<\/p>\n\n\n\n

Prioritario es que los partidos pol\u00edticos se vayan de la historia; este pa\u00eds no los necesita, ya agotaron todas sus posibilidades para encontrar los cauces que posibiliten la construcci\u00f3n de un pa\u00eds de progreso, desarrollo y bienestar.<\/p>\n\n\n\n

Urgen, eso s\u00ed, hombres y mujeres formados en la disciplina, en el apego al orden y al trabajo, es decir, productivos, respetuosos de la ley, de inteligencia notable, y no a esa burocracia parasitaria que se nutre de todo lo esencial que un pueblo requiere para consumar la existencia.<\/p>\n\n\n\n

Si se hace una revisi\u00f3n del pasado, se puede encontrar que en M\u00e9xico siempre se ha tenido la necesidad de un jefe que mande; es un mal hist\u00f3rico donde encontraron cauce los partidos pol\u00edticos; desde ah\u00ed surge lo peor de quienes tienen autoridad para hacer trizas la mentalidad de una raza en quien no se encuentra el m\u00e1s m\u00ednimo rasgo de conciencia.<\/p>\n\n\n\n

En un rasgo muy caracter\u00edstico en los procesos hist\u00f3ricos de M\u00e9xico, los partidos pol\u00edticos se hicieron fuertes erigi\u00e9ndose como las \u00fanicas opciones para la vida de toda una naci\u00f3n que, desde entonces, no encuentra rumbo promisorio y, sin saberlo, va directo al abismo.<\/p>\n\n\n\n

M\u00e9xico, necesita gobernantes honrados y patriotas pues el robo, el cohecho, el soborno y el dispendio, es lo usual como una pr\u00e1ctica de normalidad en cada administraci\u00f3n p\u00fablica que gobierna. Por cierto, sin el menor cargo de conciencia y, por supuesto, sin atisbo alguno de un castigo surgido desde la ley, que no contempla en su normativa ni la m\u00e1s remota posibilidad.<\/p>\n\n\n\n

He insistido recurrentemente en la necesidad de recuperar en los liderazgos pol\u00edticos a personas que sean capaces de mantenerse fieles a principios que le pongan alto a la tentaci\u00f3n de mentir por sistema, que no sean presa f\u00e1cil de la mezquindad y la vulgaridad, tan propio de la turba enloquecida que vive sostenida por la falacia met\u00f3dica, por el oportunismo insultante, por la sumisi\u00f3n m\u00e1s ruin, por la oquedad que llama al vac\u00edo, por las trampas para encumbrarse, por la frivolidad y la moda desquiciante.<\/p>\n\n\n\n

No m\u00e1s de esos. Fuera los Moreira, los Noro\u00f1a, los Garc\u00eda, los Salgado, los Mier, los Armenta, los Anaya, los Padierna, los L\u00f3pez, los\u2026<\/p>\n\n\n\n

Mi patria tiene la carencia m\u00e1s aguda que puede padecer una sociedad: el ciudadano. En este pa\u00eds falta ese componente vital que hace mover los engranajes de una comunidad. Lo que tenemos son individuos que se desplazan seg\u00fan los intereses de algunos. Porque el status de ciudadano se gana a trav\u00e9s de la conciencia, entendida en la m\u00e1s exacta y precisa extensi\u00f3n del concepto, para reafirmar la individualidad y no abdicar a favor de los dem\u00e1s y s\u00f3lo repetir las opiniones de otros porque se es incapaz de mantener en pie, aunque sea por un segundo, el pensamiento propio.<\/p>\n\n\n\n

A unas horas de ese gui\u00f1o de la democracia llamada jornada electoral, se hace necesario separar la pol\u00edtica de la ciudadan\u00eda, alejarse de ese universo de abstracci\u00f3n en que se desenvuelve, y esperar el advenimiento del ciudadano verdadero, el que se auto construye a diario y no el que es modelado desde los partidos pol\u00edticos donde moran los v\u00e1ndalos m\u00e1s infames.<\/p>\n\n\n\n

Lo que vimos de los partidos pol\u00edticos durante las eternas campa\u00f1as promovidas desde la presidencia de la rep\u00fablica, result\u00f3 de la m\u00e1s pat\u00e9tica impudicia y mediocridad. Ese panorama tan desesperanzador reafirma mi convicci\u00f3n de hace muchos a\u00f1os: no necesitamos que se vote por caudillos, esos que nos entregan los partidos pol\u00edticos, sino por proyectos que tengan muy clara la visi\u00f3n de futuro para un pa\u00eds donde el bien com\u00fan sea la realidad m\u00e1s contundente.<\/p>\n\n\n\n

Nuevamente eso tendr\u00e1 que esperar. Manifiesto aqu\u00ed todo mi repudio a ese sistema de partidos por el que se rige este pa\u00eds. Ya basta.<\/p>\n","protected":false},"excerpt":{"rendered":"De nueva cuenta, como en otras ocasiones, escribo este art\u00edculo a unas cuantas horas de que los procesos electorales nos entreguen en M\u00e9xico \n [...]<\/a>","protected":false},"author":20,"featured_media":0,"comment_status":"open","ping_status":"open","sticky":false,"template":"","format":"standard","meta":{"_mi_skip_tracking":false,"_exactmetrics_sitenote_active":false,"_exactmetrics_sitenote_note":"","_exactmetrics_sitenote_category":0,"_jetpack_memberships_contains_paid_content":false,"footnotes":""},"categories":[10],"tags":[],"jetpack_sharing_enabled":true,"jetpack_featured_media_url":"","_links":{"self":[{"href":"https:\/\/espacio4.mx\/wp-json\/wp\/v2\/posts\/9603"}],"collection":[{"href":"https:\/\/espacio4.mx\/wp-json\/wp\/v2\/posts"}],"about":[{"href":"https:\/\/espacio4.mx\/wp-json\/wp\/v2\/types\/post"}],"author":[{"embeddable":true,"href":"https:\/\/espacio4.mx\/wp-json\/wp\/v2\/users\/20"}],"replies":[{"embeddable":true,"href":"https:\/\/espacio4.mx\/wp-json\/wp\/v2\/comments?post=9603"}],"version-history":[{"count":1,"href":"https:\/\/espacio4.mx\/wp-json\/wp\/v2\/posts\/9603\/revisions"}],"predecessor-version":[{"id":9604,"href":"https:\/\/espacio4.mx\/wp-json\/wp\/v2\/posts\/9603\/revisions\/9604"}],"wp:attachment":[{"href":"https:\/\/espacio4.mx\/wp-json\/wp\/v2\/media?parent=9603"}],"wp:term":[{"taxonomy":"category","embeddable":true,"href":"https:\/\/espacio4.mx\/wp-json\/wp\/v2\/categories?post=9603"},{"taxonomy":"post_tag","embeddable":true,"href":"https:\/\/espacio4.mx\/wp-json\/wp\/v2\/tags?post=9603"}],"curies":[{"name":"wp","href":"https:\/\/api.w.org\/{rel}","templated":true}]}}