{"id":9830,"date":"2024-07-19T22:49:47","date_gmt":"2024-07-20T04:49:47","guid":{"rendered":"https:\/\/espacio4.mx\/?p=9830"},"modified":"2024-08-03T21:03:09","modified_gmt":"2024-08-04T03:03:09","slug":"siempre-el-dinero","status":"publish","type":"post","link":"https:\/\/espacio4.mx\/siempre-el-dinero\/","title":{"rendered":"\u00a1Siempre el dinero!"},"content":{"rendered":"\n

Para Jos\u00e9 Antonio Ib\u00e1\u00f1ez, amigo y compa\u00f1ero, hombre consagrado a la defensa de los derechos humanos.<\/em><\/p>\n\n\n\n

Hace un par de meses, nada m\u00e1s por conversar y entretenernos, pregunt\u00e9 a varios amigos y amigas, \u00bfqu\u00e9 porcentaje de sus pensamientos se concentran diariamente en el dinero? Me sorprend\u00ed al escuchar sus respuestas. Los porcentajes frisaban el 70% e, incluso, en alg\u00fan caso, se lleg\u00f3 a hablar del 90%. No import\u00f3 el estrato social de pertenencia. Tom\u00e9 conciencia de la preocupaci\u00f3n excesiva por el dinero, del desgaste innecesario que provoca pensar tanto en \u00e9l. Al final de la novela \u00a1Siempre el dinero!, de Enzensberger, la t\u00eda F\u00e9 aconseja a su sobrina heredera Felicitas lo siguiente: \u00abCuanto menos pens\u00e9is en el dinero, mejor. En el mundo hay muchas cosas menos fastidiosas\u00bb. Ojal\u00e1 le hagamos caso a la t\u00eda F\u00e9.<\/p>\n\n\n\n

Ahora, el diario La Jornada<\/em>, en su edici\u00f3n del 26 de junio de 2024, afirma, citando una encuesta del Inegi y de la Condusef, que: \u00abAnte la baja resiliencia para hacer frente a un gasto imprevisto, la poca seguridad en el futuro financiero; as\u00ed como casi nunca o nunca sobra dinero al final del mes, siete de cada 10 personas adultas en M\u00e9xico se encuentran en un nivel de estr\u00e9s financiero moderado y alto\u00bb. (Primera Encuesta Nacional sobre Salud Financiera, Ensafi, 2023). El estr\u00e9s financiero, moderado m\u00e1s alto, en la poblaci\u00f3n mexicana, alcanza el 71.5%. La consecuencia de esto es un da\u00f1o a la salud f\u00edsica y mental del mexicano. La encuesta revela, adem\u00e1s, que frente a los gastos imprevistos, poco o nada podemos hacer. El futuro financiero se torna incierto. Y aqu\u00ed viene al caso la expresi\u00f3n sabinesca \u00abno me pidas llegar a fin de mes\u00bb, pues la mitad de la poblaci\u00f3n adulta consider\u00f3 que casi nunca o nunca le sobra dinero al final del mes. La mitad de la poblaci\u00f3n, seg\u00fan esta encuesta, no goza de bienestar financiero. El estado de bienestar impulsado por el gobierno actual ha ayudado, pero no ha resuelto el problema. Seguimos en capilla.<\/p>\n\n\n\n

Asegura, con humor, mi buen amigo Jos\u00e9 Luis Aranda, que \u00ablos gastos no se detienen\u00bb. Y le sobra raz\u00f3n. El dicho popular lo confirma: \u00abEl dinero llega cojeando, pero se va bailando\u00bb. Otro \u00abcuaderno\u00bb, Ram\u00f3n Mart\u00ednez, filosofa: \u00abEl dinero no te conduce a la felicidad, pero bien que te deja a una cuadra\u00bb.<\/p>\n\n\n\n

Muchas frases c\u00e9lebres han contribuido a sumarle significado al dinero. Y vaya que lo tiene. Pero hay que defendernos de su perniciosa influencia. Los cananeos contaban en su pante\u00f3n con un dios del dinero, una poderosidad de la bonanza. Se trata del llamado \u2014presumido hab\u00eda de ser\u2014 dios Mamm\u00f3n. Y es que los fenicios exageraban la utilidad del billete verde. Nestroy lo expresa jocosamente de este modo: \u00abLos fenicios inventaron el dinero. Pero \u00bfpor qu\u00e9 tan poco?\u00bb. N\u00f3tese que al hablar de divinidad o de deidad, atin\u00e9 a buscar como sin\u00f3nimo la palabra \u00abpoderosidad\u00bb.<\/p>\n\n\n\n

Me gusta referirme as\u00ed a los dioses por el poder que tienen sobre nosotros. Y el dinero, \u00a1vaya que lo tiene! La ambici\u00f3n por el dinero ha cobrado millones de vidas. \u00abPoderoso caballero es don Dinero\u00bb, cant\u00f3 el poeta espa\u00f1ol Francisco de Quevedo. El poder en forma de dominio nos acojona. El dinero, al igual que la muerte, lo iguala todo: \u00aby pues es quien hace iguales al duque y al ganadero, poderoso caballero es don Dinero\u00bb.<\/p>\n\n\n\n

Hace unos d\u00edas me enviaron un meme donde aparec\u00eda una chica recostada, con un fajo de billetes en la frente y la leyenda: \u00abTratamiento para el dolor de cabeza, insomnio, estr\u00e9s y depresi\u00f3n\u00bb. No creo que \u00e9sta sea la soluci\u00f3n para el llamado \u00abestr\u00e9s financiero\u00bb del que habla la encuesta de marras. Al dinero hay que saber controlarlo, relativizarlo, pues, finalmente, a ese dios Mamm\u00f3n lo inventaron los cananeos. Y lo primero que hay que hacer, sin caer en el conformismo napole\u00f3nico del \u00abno le pidas al Se\u00f1or, hombre que te d\u00e9 una casa, agrad\u00e9cele mejor que tienes vida y trabajas\u00bb, es optar por una vida sencilla, sin lujos, lejos del consumo compulsivo, casi al estilo del Poverello de As\u00eds y su \u00abdeseo poco y lo poco que deseo, lo deseo poco\u00bb.<\/p>\n\n\n\n

Ante la partida de mi querido amigo Jos\u00e9 Antonio Ib\u00e1\u00f1ez, invito a leer su art\u00edculo \u00abLos para\u00edsos fiscales: gangrena social\u00bb, publicado en el n\u00famero cuatro de Arteletra<\/em>: arteletra.com.mx. El economista y el soci\u00f3logo que fue Jos\u00e9 Antonio entend\u00eda con agudeza la funci\u00f3n del dinero y la importancia de situarse frente a \u00e9l desde el \u00abnosotros\u00bb. As\u00ed culmina su art\u00edculo: \u00abCon m\u00e1s deseos que convicci\u00f3n, esperamos que las reformas antecedan a las tolvaneras de violencia anunciadas por la creciente desigualdad social dejada en el mundo por el neoliberalismo: son tiempos para el nosotros\u00bb.<\/p>\n\n\n\n

Referencia:<\/p>\n\n\n\n

Enzensberger, Hans Magnus, \u00a1Siempre el dinero! Una novelita sobre econom\u00eda<\/em>, Trad. de Carles Andreu, Anagrama, Panoramas de narrativas, No. 919, Barcelona, 2016.<\/p>\n","protected":false},"excerpt":{"rendered":"Para Jos\u00e9 Antonio Ib\u00e1\u00f1ez, amigo y compa\u00f1ero, hombre consagrado a la defensa de los derechos humanos. Hace un par de meses, nada m\u00e1s \n [...]<\/a>","protected":false},"author":95,"featured_media":9805,"comment_status":"open","ping_status":"open","sticky":false,"template":"","format":"standard","meta":{"_mi_skip_tracking":false,"_exactmetrics_sitenote_active":false,"_exactmetrics_sitenote_note":"","_exactmetrics_sitenote_category":0,"_jetpack_memberships_contains_paid_content":false,"footnotes":""},"categories":[36],"tags":[],"jetpack_sharing_enabled":true,"jetpack_featured_media_url":"https:\/\/espacio4.mx\/wp-content\/uploads\/2024\/07\/23-dinero.jpg","_links":{"self":[{"href":"https:\/\/espacio4.mx\/wp-json\/wp\/v2\/posts\/9830"}],"collection":[{"href":"https:\/\/espacio4.mx\/wp-json\/wp\/v2\/posts"}],"about":[{"href":"https:\/\/espacio4.mx\/wp-json\/wp\/v2\/types\/post"}],"author":[{"embeddable":true,"href":"https:\/\/espacio4.mx\/wp-json\/wp\/v2\/users\/95"}],"replies":[{"embeddable":true,"href":"https:\/\/espacio4.mx\/wp-json\/wp\/v2\/comments?post=9830"}],"version-history":[{"count":1,"href":"https:\/\/espacio4.mx\/wp-json\/wp\/v2\/posts\/9830\/revisions"}],"predecessor-version":[{"id":9831,"href":"https:\/\/espacio4.mx\/wp-json\/wp\/v2\/posts\/9830\/revisions\/9831"}],"wp:featuredmedia":[{"embeddable":true,"href":"https:\/\/espacio4.mx\/wp-json\/wp\/v2\/media\/9805"}],"wp:attachment":[{"href":"https:\/\/espacio4.mx\/wp-json\/wp\/v2\/media?parent=9830"}],"wp:term":[{"taxonomy":"category","embeddable":true,"href":"https:\/\/espacio4.mx\/wp-json\/wp\/v2\/categories?post=9830"},{"taxonomy":"post_tag","embeddable":true,"href":"https:\/\/espacio4.mx\/wp-json\/wp\/v2\/tags?post=9830"}],"curies":[{"name":"wp","href":"https:\/\/api.w.org\/{rel}","templated":true}]}}