Luces y sombras 716

Luces

El ingeniero mexicano Jesús Rodríguez Ávila fue seleccionado para participar en el programa AEXA de la Administración Nacional de Aeronáutica y el Espacio, más conocida como NASA (por sus siglas en inglés: National Aeronautics and Space Administration). Originario de San Luis Potosí, Rodríguez cursa una maestría en ingeniería aeroespacial en la Universidad Politécnica Metropolitana del estado de Hidalgo (UPMH), en donde realiza investigaciones sobre la generación de energía eléctrica con desechos nucleares para misiones y vuelos espaciales. El joven realizará una estancia en la base espacial del estado de Alabama,  Estados Unidos, del 12 al 18 de noviembre de este año.  La noticia fue compartida en redes oficiales por el Municipio de Cerritos, San Luis Potosí, donde la alcaldesa Leticia Vázquez Hernández informó que sostuvo una reunión online con el ingeniero y orgullo potosino. Luz para los jóvenes que con su esfuerzo ponen en alto el nombre de México.

Cuatro militares involucrados en la masacre de jóvenes en Nuevo Laredo, Tamaulipas, el pasado 26 de febrero, fueron vinculados a proceso por un juez federal. Los soldados Bernardo, Agustín, Jorge Nicolás y Juan Carlos enfrentarán su proceso penal bajo la medida cautelar de prisión preventiva oficiosa desde el Campo Militar Número 1 en la Ciudad de México. Enfrentan cargos por los delitos de homicidio calificado y homicidio calificado en grado de tentativa por la muerte de cinco jóvenes y lesiones a uno más en Nuevo Laredo. Si bien la Fiscalía General de la República (FGR) no informó la vinculación a proceso, el Ministerio Público de la Federación, a cargo del fiscal general Alejandro Gertz Manero, ya había señalado que los militares son probables responsables de la muerte de los cinco jóvenes identificados como Gustavo Pérez, Wilberto Mata Estrada, Jonathan Aguilar Sánchez, Alejandro Trujillo Rocha y Gustavo Ángel Castillo. Una luz de esperanza se abre en un país donde las ejecuciones extrajudiciales raramente se castigaban.

Por fin el Gobierno de México está pidiendo a Estados Unidos que asuma su responsabilidad en el problema del tráfico de drogas que ha sumido a los dos países en una ola de violencia. En una reunión bilateral llevada a cabo en la Casa Blanca, el 13 de abril, la delegación mexicana encabezada por el canciller Marcelo Ebrard fijó su posición en cuanto al  tráfico del fentanilo y las muertes asociadas a esta droga. Días antes, políticos demócratas llamaron a México a hacer más en el combate contra la droga y el crimen organizado, mientras que los republicanos pidieron incluso una intervención militar en territorio mexicano. El presidente Andrés Manuel López Obrador ha dicho que la sobredosis de opiáceos es un asunto de salud pública que Estados Unidos debe resolver y ha negado que el fentanilo se fabrique en México. Por su parte, EE. UU. informó que las incautaciones de esta droga en la frontera aumentaron 31% el año pasado y que en ese mismo período procesó a casi 4 mil personas por el tráfico de la sustancia.

Sombras

El secuestro de cuatro estadounidenses en Matamoros, Tamaulipas, y el posterior deceso de dos de ellos, afectará directamente al turismo en México durante la temporada de vacaciones de primavera —conocida como spring break— este año pues el Gobierno de Estados Unidos emitió una alerta de viaje para sus ciudadanos junto a una serie de recomendaciones para evitar situaciones peligrosas. El aviso solicita a sus nacionales considerar el crimen, el abuso de droga, alcohol y productos farmacéuticos, además de agresiones sexuales y arrestos en territorio mexicano. «Los ciudadanos estadounidenses deben tener mayor precaución en las áreas del centro de los lugares populares de vacaciones de primavera, incluidos Cancún, Playa del Carmen y Tulum, especialmente después del anochecer», advierte el comunicado. Washington también llamó la atención sobre las faltas cívicas de las que podrían ser sujetos quienes no respeten el cumplimiento de las leyes mexicanas. De acuerdo con la Secretaría Estatal de Turismo de Quintana Roo, este año se esperan alrededor de 30 mil jóvenes estadounidenses, la mayoría en Cancún, principal destino turístico de México.

Un desliz del papa Francisco le generó fuertes críticas al máximo jerarca de la Iglesia católica. El pasado 13 de abril, durante una reunión con religiosas en El Vaticano, el papa llamó «neuróticas» a las madres superioras. «Es propio de las mujeres ser generosas, así es. A veces hay alguna neurótica, pero esto pasa un poco en todas partes ¿no?», dijo el sumo pontífice ante las participantes en la Asamblea General de la Unión de Madres Superioras de Italia (USMI). Durante su discurso, que fue difundido por la Santa Sede, el papa dedicó varias palabras para describir su visión de las mujeres: «son buenas, saben crear nuevos caminos, saben dar», dijo. Francisco llamó además a las madres superioras a luchar contra las «enfermedades» asociadas a la dedicación religiosa, como «el licor de la amargura», al que consideró como «el elixir del diablo». No es la primera vez que el papa recibe críticas por su postura ante las mujeres. En 2019, debió ofrecer disculpas por haber afirmado que «todo feminismo acaba siendo un machismo con faldas».

El subsecretario de Derechos Humanos, Población y Migración de la Secretaría de Gobernación, Alejandro Encinas, declaró que no hubo intercambio de disparos entre militares y los cinco jóvenes asesinados en Nuevo Laredo, Tamaulipas. Según el funcionario existen datos suficientes para demostrar que se trató de una ejecución por parte de los elementos castrenses. «Esperemos a que venga la conclusión de la investigación de la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH) para dar cuenta de qué pasó, pero evidentemente hay elemento para acreditar que los jóvenes no iban armados y que no había enfrentamiento», indicó. Los hechos tuvieron lugar el 27 de febrero y desde entonces se han generado manifestaciones con intereses encontrados. Algunas piden la liberación de los militares detenidos, otras exigen que «quien infringe la ley y comete un delito, debe cumplir con su responsabilidad». El presidente López Obrador aseguró que el caso no se resolverá por presiones de ningún tipo. «(Los inculpados) tienen todo su derecho de expresarse, ya lo externé aquí y que tengan confianza que no se actúa bajo presión, el Gobierno que represento no está sujeto a chantajes ni presión de nadie», dijo.