Saña y colmillo contra Parras

¡Vive Dios que Parras es perenne! Y vaya que ha sobrevivido a los últimos alcaldes con el mismo estoicismo que resistió La Peste, la viruela loca o la tisis, que sembró de muerte a este valle de los Pirineos, que también resistió el ataque de los indios, de franceses invasores, La Revolución y la pandemia, azotes de los que ha sido más fácil defenderse que de los enemigos internos, que con mucha saña y maldad han atacado a los parrenses desde el interior de la Presidencia Municipal, como es el caso de sus alcaldes hasta Ramiro Pérez Arciniega, o de aquellos burócratas ingratos y malagradecidos que cada trienio demandan a los parrenses porque se oponen al cambio de gobierno, y se niegan a renunciar porque quieren seguir sangrando al pueblo, con una mezquina ambición que borra cualquier rasgo de gratitud hacia los parrenses que les dieron de comer algunos años, aunque no sirvan para nada, para maldita la cosa.

Fue el 10 de octubre del año pasado cuando en este espacio publicamos el caso extremo del tres veces alcalde y luego regidor Evaristo Madero Marcos —cuatro veces edil, para desgracia de Parras—, y que luego de ausentarse del Cabildo presidido por Ramiro Pérez procedió a demandar al Municipio el pago de salarios caídos, prestaciones, bonos y los emolumentos que supuestamente él merecía por ser Evaristo Madero Marcos, el agorero del desastre.

Y aún no sabemos si Evaristo ganó la demanda laboral y sí ya sangró más a los parrenses, con salarios caídos y demás prestaciones que “él merece” por ser lo que es, todo un crisóstomo que ha esculpido su personalidad a punta de sablazos, la esencia exacta de un estilo, el estilo de joder a los parrenses, porque si Evaristo y sus secuaces ganan las demandas laborales interpuestas, no será el alcalde actual ni los ediles de su Cabildo quienes paguen de su bolsa las indemnizaciones, sino los sufridos parrenses, que verán cómo se esfuma el presupuesto público gracias a Evaristo y esa inclinación que lo domina, su nefasta tendencia por la destrucción.

Y lo mismo decimos de todos aquellos burócratas que actualmente han demandado laboralmente a los parrenses, porque sepa usted que actualmente hay 112 malagradecidos demandando al Municipio, muchas más demandas de las que actualmente enfrenta el Ayuntamiento de Torreón, demandas laborales que requieren de un buen bufete de abogados, porque si no se atienden dichos litigios, si se pierden por omisión o negligencia, no habrá con qué pagar las indemnizaciones y el futuro de Parras estará embargado por decenios y será un Municipio fallido.

Porque siempre hemos tenido al enemigo en casa con esos traidores que demandan cada tres años a los parrenses, encajando con saña sus colmillos. Y en razón de que ellos, con su voraz actitud agreden al pueblo de Parras, afectando los servicios, la seguridad, el abasto de agua, también los parrenses tienen el derecho de saber quién los está demandando, quiénes pretenden mamar más del presupuesto, de quiénes nos tenemos que defender.

Asimismo, es urgente que el Municipio se asesore de expertos abogados que atiendan esas demandas laborales de la burocracia, que se litigan en tribunales especiales, para que defiendan a los parrenses y no a la autoridad municipal, que somos quienes finalmente pagaremos el expolio de estos sacatripas.

Deja un comentario