Austria, un oasis laboral en el corazón de Europa

El sistema de trabajo austriaco promueve la estabilidad, la equidad y la participación. Destaca por sus jornadas laborales limitadas, horas extras bien remuneradas, 25 días hábiles de vacaciones pagadas mínimas al año, compensaciones de transporte, seguro social de alto nivel y cooperación colectiva, entre otros beneficios

En Austria, el sistema de trabajo se caracteriza por una detallada combinación de políticas laborales que promueven la estabilidad, la equidad y la participación de los trabajadores. La AK Arbeitekammera (Cámara de Trabajo) de Austria ofrece una amplia gama de servicios para los trabajadores, que van desde capacitaciones, asesoramientos, consultas, propuestas para mejorar el empleo y denuncias por maltrato y violaciones a las leyes laborales, todo de forma gratuita y con un trato amable y humano.

Una de las cualidades más destacadas del sistema de trabajo austriaco son sus horarios laborales que se dividen en dos tipos: el de tiempo completo y el teilzeit (tiempo parcial en alemán).

El primero es de 40 horas a la semana, con dos días de descanso. Cada jornada está limitada a ocho horas al día, con una pausa de 30 minutos después de las primeras seis horas de trabajo. El salario varía según las capacidades del trabajador y del contrato, pero siempre debe respetar el salario mínimo establecido por la ley laboral. Este puede ser un salario fijo o por hora y está sujeto a negociaciones colectivas de la Cámara de Trabajo, convenios laborales o contratos individuales.

Por otro lado, el teilzeit, o trabajo a tiempo parcial, se refiere a cualquier jornada cuya duración es menor que la jornada completa estándar de trabajo (ocho horas al día o 40 a la semana). Un trabajo a tiempo parcial puede ser de 39.5 horas semanales. Estos horarios generalmente varían dependiendo de las necesidades tanto del empleador como del empleado, pudiendo ser fijos o flexibles. El salario se ajusta de acuerdo a las horas trabajadas de manera específica.

Una de las ventajas de este sistema es su flexibilidad en las horas de trabajo, ya que se ajusta a las necesidades tanto del empleador como del trabajador. Esto permite adaptar las horas laborales a las demandas específicas de la empresa y del empleado, quien puede seleccionar sus días de descanso y trabajo.

Se requiere una comunicación constante entre los supervisores y los empleados para llegar a un acuerdo mutuo sobre los horarios semanales. Este sistema está diseñado para promover la inclusión de personas con discapacidad, madres solteras y cualquier individuo que necesite tiempo adicional para actividades personales.

Los beneficios laborales pueden comprender un mínimo de 20 días hábiles de vacaciones, seguros privados de salud, seguro de desempleo, seguro contra accidentes, pensiones y otros beneficios menores como asistencia y/o reembolso de transporte y apoyo familiar, entre otros.

Los trabajadores suelen tener acceso a oportunidades de desarrollo profesional y capacitación que van desde cursos hasta licenciaturas, mismas que son subvencionadas por el Gobierno por medio de la AMS por su nombre en alemán Arbeitsmarktservice (servicio del mercado laboral) o la empresa en la que trabajan.

La relación México-Austria

México y Austria mantienen un cordial convenio político-cultural. Establecieron sus relaciones diplomáticas el 30 de julio del año 1842 con la firma del Tratado de Amistad y Comercio. Las relaciones fueron suspendidas durante el Segundo Imperio Mexicano del emperador austriaco Maximiliano de Habsburgo (1864-1867) y fueron restablecidas en 1901.

En marzo de 1938, México fue el único país que protestó por escrito ante la Sociedad de Naciones contra la anexión de Austria a la Alemania nazi.

En los años siguientes, el Gobierno mexicano proporcionó un apoyo generoso al acoger aproximadamente a mil 500 ciudadanos austriacos perseguidos por el régimen nazi (1938-1945). Incluso en la cuestión territorial del Alto Adigio (Tirol del Sur) y en relación al Tratado de Estado Austriaco de 1955, Austria recibió apoyo por parte de México.

Además, se destacan eventos como la inauguración del Foro Cultural de Austria en México en 2002 y la participación de Austria como país invitado de honor en 2012 durante el Festival Internacional Cervantino.

Si bien comparar sistemas de trabajo entre países es complejo, ya que depende de factores culturales, históricos y sociopolíticos, se podría considerar que el sistema austriaco es más efectivo y eficiente que el mexicano en algunos aspectos.

La estabilidad económica y política, la protección de los derechos de los trabajadores, la negociación colectiva y la participación de los empleados en la toma de decisiones hacen que en Austria exista un entorno laboral más estable, equitativo y predecible.

Además, los sindicatos tienen una fuerte representación y son activos en la negociación de salarios y beneficios para los trabajadores. Cabe mencionar que, si un trabajador sufre de una injusticia laboral, las multas aplicadas a las empresas infractoras van desde los mil euros hasta cifras de cinco dígitos o incluso el cierre de la empresa.

El sistema educativo del país está muy bien desarrollado, lo cual garantiza que sus empleados estén altamente cualificados y capacitados para una amplia gama de actividades, y la aplicación de las leyes es efectiva y rigurosa.

Sistema laboral mexicano

De acuerdo con el Diario Oficial de la Federación, la Ley Federal del Trabajo promulgada en 1970 estableció que el tiempo designado para el descanso de los trabajadores en México era de seis días de vacaciones luego de cumplir 12 meses de antigüedad en la empresa.

En 2022, se aprobó la reforma de la modificación del artículo 76 de la Ley Federal de Trabajo (LTF), la cual entró en vigor el 1 de enero de 2023 y realizó cambios importantes en materia de vacaciones.

Con la nueva reforma, en lugar de seis días máximos de vacaciones al primer año de servicio, los trabajadores podrán tomar 12 días laborales de descanso, que podrán ser continuos. Asimismo, la nueva reforma laboral establece que por cada año de servicio se incrementará el número de días de descanso en dos, hasta llegar a 20 días. Además, al cumplirse el sexto año de trabajo, el periodo de descanso se incrementará en dos días por cada cinco años trabajados.

Según una encuesta de la organización Administración de Riesgos y Consultorías en Capital Humano (AON), el 75% de las empresas mexicanas no tiene un plan para implementar la reforma de vacaciones. Esto se debe a que la reforma implica ajustes en los presupuestos y operaciones de las empresas, ya que estas no han definido acciones para optimizar los cambios en el tema de las vacaciones (El Economista, 22.02.24)

Pero, ¿cuántos trabajadores conocen esta reforma? ¿Cuántas empresas e instituciones la respetan? ¿Cuántas empresas tienen el poder monetario para resolver los conflictos generados por esta nueva reforma laboral? ¿Y cuántas empresas respetan los derechos laborales de sus trabajadores?

Aunque en México existen sindicatos, no tienen el mismo control sobre los derechos de los trabajadores como en países de Europa central. Y aunque también existen cooperativas de consumidores, de productores, de ahorro y préstamos así como de transporte de servicios, no hay una sociedad cooperativa que tenga el peso significativo sobre los beneficios de los trabajadores mexicanos, como se puede encontrar, por ejemplo, en Austria.

Uno de los problemas latentes en Latinoamérica es la corrupción que existe en todos los sectores públicos, irónicamente, esta corrupción se debe en parte a los bajos ingresos de los trabajadores y a los problemas socioculturales y políticos. Lamentablemente, México se encuentra en estas circunstancias.

Futuro laboral incierto

¿Qué sucedería si en este momento México adoptara por completo el sistema de trabajo austriaco? Es una pregunta que requiere reflexión, pues responderla implicaría llevar a cabo un minucioso estudio de la sociedad mexicana para determinar si este experimento resultaría beneficioso. Es importante señalar que las características y necesidades de un ciudadano mexicano difieren de las de un austriaco. Las divergencias históricas, culturales, sociales y políticas crean una brecha considerable entre ambas naciones.

Para abordar la pregunta de manera objetiva sería necesario realizar un análisis profundo de nuestra identidad como mexicanos, tal como lo hizo en su momento Samuel Ramos Magaña, considerado el padre de la filosofía mexicana, en su obra El perfil del hombre y la cultura en México (1939).

En este momento, un sistema de trabajo como el austriaco posiblemente no sería viable en México, pues mientras el primero se basa en la protección de los derechos de los trabajadores, la negociación colectiva y la participación activa de los empleados en la gestión de las empresas, el segundo es más complejo y enfrenta desafíos en cuanto al cumplimiento de las regulaciones laborales.

En teoría, existen leyes y organismos gubernamentales encargados de proteger los derechos de los trabajadores y promover condiciones laborales justas y seguras en el país. Sin embargo, en la práctica, la aplicación efectiva de estas regulaciones es limitada, lo que puede resultar en vulneraciones a los derechos y en condiciones laborales precarias para muchos trabajadores, especialmente aquellos empleados en el sector informal. E4

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Emigrar para trabajar en la Unión Europea

Si bien Austria es considerada un «paraíso laboral», la llegada de refugiados de guerra ha puesto al sistema en jaque.

La mayoría de los refugiados reciben asistencia hasta encontrar un trabajo, pero buena parte de ellos termina ocupando puestos de bajo salario, lo que supone un costo elevado para la economía del país.

La situación para un migrante es diferente y depende de sus cualificaciones, capacidad económica y resistencia a los procedimientos burocráticos, que, aunque sin corrupción, son complicados en este país.

Es común pensar en emigrar en busca de una mejor calidad de vida, pero la realidad es que sin cumplir ciertos requisitos básicos, como dominar el idioma alemán a un nivel educativo alto, tener una carrera cualificada homologable en el país, contactos laborales, un contrato que garantice un salario neto mensual mínimo de 2 mil 633 euros, contar con vivienda, seguro social austriaco, entre otros, es difícil encontrar empleo.

Trabajar «en negro», es decir, sin estar registrado en la Cámara de Trabajo, es prácticamente imposible, riesgoso y poco realista. Aunque algunas personas lo logran, no es la mejor opción ya que no tienen acceso a los beneficios que ofrece el país. Además, una vez descubiertos, se enfrentan a multas elevadas y pueden perder el permiso de entrada no solo a Austria, sino a toda la Unión Europea, hasta por diez años.

No hay una receta mágica para acceder al mercado laboral de Austria, Alemania o Suiza, pero tampoco es imposible. Se requiere paciencia, dedicación, disciplina y esfuerzo.

Es importante entender que el idioma en Austria tiene muchas variantes y dialectos, lo que puede dificultar la integración. Además, la vida en Austria tiende a ser solitaria para un latinoamericano, acostumbrado a un ritmo de vida diferente.

Para ser aceptado en la sociedad austriaca, es crucial respetar las normas, leyes y reglas, tanto por educación como porque violarlas puede acarrear multas que son descontadas directamente de las cuentas bancarias si no se pagan voluntariamente. Emigrar a un país europeo no es una decisión fácil y conlleva muchos desafíos, pero si uno logra adaptarse e integrarse, la vida en el viejo continente puede ser muy agradable. E4

Comparativo de sistemas laborales entre ambas naciones

	Austria	México
Jornada laboral y vacaciones	Suele ser de ocho horas al día y 40 horas a la semana. Los empleados tienen derecho a un mínimo de 25 días hábiles de vacaciones al año. Aumenta por antigüedad y acuerdos.	Generalmente es de ocho horas al día y 48 horas a la semana. Mínimo de seis días de vacaciones pagadas después de un año de trabajo continuo. Aumenta con la antigüedad.
Salario mínimo y prestaciones	El salario mínimo es ajustado periódicamente para reflejar cambios en el costo de vida. Los beneficios sociales incluyen atención médica gratuita o de bajo costo, pensiones, subsidios por enfermedad y maternidad, entre otros. Subsidio mensual por pérdida de trabajo hasta por ocho meses.	Salario mínimo establecido por la Comisión Nacional de Salarios Mínimos, aunque también existen salarios mínimos diferentes en algunas regiones. Los empleadores están obligados a proporcionar seguro de salud, seguro de vida y prestaciones como pensiones y por desempleo.
Sindicatos y convenios	La negociación entre sindicatos y empleadores desempeña un papel crucial en la determinación de los salarios y las condiciones laborales. Abarcan una variedad de sectores y establecen estándares mínimos que los empleadores deben cumplir.	Los sindicatos juegan un papel importante en la protección de los derechos de los trabajadores y en la negociación colectiva de salarios y condiciones laborales. Sin embargo, la afiliación sindical en México varía considerablemente entre diferentes sectores y regiones.
Protección del empleo	Las leyes protegen a los trabajadores contra el despido injustificado. Esto incluye un período de aviso previo y, en algunos casos, indemnizaciones por despido. Además, existen regulaciones específicas para proteger a grupos vulnerables en el mercado laboral, como los trabajadores discapacitados o las mujeres embarazadas.	Existen regulaciones específicas para garantizar condiciones laborales seguras y justas para los trabajadores. Sin embargo, en algunos sectores, especialmente en el informal, estas regulaciones pueden no aplicarse adecuadamente. La Secretaría del Trabajo y Previsión Social (STPS) es la institución encargada de hacer cumplir estas regulaciones y promover la seguridad laboral.
Formalidad y participación	Los trabajadores tienen una fuerte representación en las empresas a través de comités de empresa y consejos de trabajadores. Estas estructuras permiten la participación de los empleados en la toma de decisiones relacionadas con las condiciones de trabajo, la seguridad laboral y otros asuntos relevantes.	Una parte significativa de la fuerza laboral mexicana trabaja en el sector informal, donde las condiciones laborales y los salarios suelen ser más precarios y hay una falta de protección social. El Gobierno ha implementado programas para abordar este problema y mejorar las condiciones de los trabajadores informales.