Paranoicos

La reciente inauguración del Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles dejó al descubierto una vez más el acentuado clasismo y racismo de una parte de la sociedad mexicana, los apodados fifís que odian a la 4T, que descalificaron la denominación de «Aeropuerto Internacional» de primer mundo y añoraban aquel que les había prometido Peña Nieto; sin embargo, en este acto de inauguración estuvo el pueblo, el México auténtico no el palaciego.

En las redes sociales se publicaron todo tipo de denostaciones en contra del presidente de México y de la 4T, por ejemplo, un meme presentaba a AMLO como a una señora cargando un guajolote asombrado frente a una megaobra, otro en donde se exhibe que solo «autobuses viejos» aterrizarían en ese sitio, como si viajar en camiones fuera desprestigiante y en forma despectiva la llamaron la central camionera. Los memes y tweets resumen el desprecio, la afrenta hacia las clases populares, hacia el México real, el de más de 60 millones de mexicanos pobres forjado por los Gobiernos del PRIAN durante casi 90 años y la afrenta que representa para los fifís paranoicos. Ese México al que descalifican y dicen que, «un aeropuerto internacional es para ciertas personas, para gente de negocios, ejecutivos, estudiantes, artistas… No —dijeron—, ahí no viajan indígenas, migrantes… No —reprocharon—, cómo dejaron entrar al AIFA a ambulantes que vendían cachuchas, imágenes de AMLO. «¡Qué vergüenza!», recriminaron.

La cancelación del aeropuerto peñista de Texoco, su obra icónica, dolió y las heridas aún siguen sangrando. Ahí estaba representado el aspiracionismo neoliberal de las élites y clases medias que se expresan en contra de la 4T cuando se trata de las acciones de Gobierno y piensan que se debe gastar mucho dinero para tener instalaciones de primer mundo. Pese a que cancelar el oneroso aeropuerto de Texcoco políticamente tuvo un costo grande para AMLO; las élites creen que la austeridad es innecesaria; no justifican pagar más impuestos o que se graven los ingresos de los más ricos. Encaminarse a un primer mundo sí, pero sólo en ciertas cosas, la frivolidad supina, la del México moderno que es sólo para unos cuantos que viven encerrados en sus ghettos distantes de las carencias del país real.

Fue mal visto por los paranoicos que una mujer vendiera tlayudas, quesadillas, tamales, tacos, comida tradicional mexicana y que los asistentes e incluso miembros de la Guardia Nacional las compraran y consumieran tranquilamente, celebrando la gesta de los más de 60 mil trabajadores mexicanos que colaboraron con sus manos en la construcción rápida y a quienes se les otorgó un lugar protagónico en la inauguración. Pero las élites lo ven como populismo, una imagen horrible que se daba ante el mundo, aunque el AIFA es lo que los mexicanos moralmente podemos permitirnos, es un asunto de realidad.

El presidente mostró que sí fue posible cumplir su promesa de que en tres años inauguraría el nuevo aeropuerto de Santa Lucía, triunfo político que muchos creyeron imposible, es el elemento principal después de haber cancelado Texcoco.

Se puede concluir que el AIFA es la obra que materializa una visión de México y del mundo, una visión orgullosa de la ingeniería mexicana y sus trabajadores que hicieron posible una de las obras más importantes del sexenio en un tiempo récord, contra la visión peñista que se centraba en la del enaltecimiento de la globalización y el neoliberalismo extranjero.

No hay plazo que no se cumpla

Para cuando se publique esta columna la revocación de mandato del domingo 10 habrá pasado, los pronósticos dan por hecho que la participación será muy baja; para los que odian a AMLO, la revocación de mandato será un rotundo fracaso, puede ser, los ciudadanos no saldrán a votar, quizá, lo predicen los profetas apocalípticos con todo tipo de argumentos que tal vez tengan sustento en una realidad en la que el abstencionismo es costumbre y pauta, norma común de las elecciones, como las de diputados locales que habitualmente son las que menor participación alcanzan, el abstencionismo en Coahuila no es una novedad, casi podríamos decir que es la norma y en un novedoso ejercicio de la revocación de mandato, saturado del odio ciego opositor y la descalificación, el desánimo induce a la no participación, cumple su misión.

Resulta curioso, nadie manifiesta detestar al expresidente Calderón que desató una guerra que ha teñido de sangre al país o porque no hizo justicia en el caso de la guardería en la que murieron incinerados decenas de bebés y otras tantas e innumerables omisiones o acciones perpetradas por su sucesor Peña Nieto, como la «verdad histórica» sobre los 43 jóvenes guerrerenses desaparecidos o el error de diciembre de 1994 de Ernesto Zedillo que causó la devaluación del peso mexicano, fuga de capitales, falta de liquidez y un aumento inconcebible de la deuda del país que aún pagamos los mexicanos y él tan feliz disfrutando de su vida, la enumeración no tendría fin en los 93 años de Gobiernos del PRIAN.

La rabia opositora se nutre del avance de la 4T que va dejando huellas. La revocación de mandato, como ya lo he dicho en otros momentos, materializa principios democráticos que antes no teníamos y, por lo tanto, cualquier demócrata debe defenderla y protegerla; hay datos de los Gobiernos del PRIAN que visibilizan el daño que dejaron al país, la deuda externa con Calderón se incrementó en 89% y con Peña Nieto 31%, ahora por primera vez la deuda no aumenta, subió por la crisis de la pandemia, pero es un crecimiento de 3%. Además, en este sexenio el salario mínimo aumentó un 72%, como nunca durante los últimos 30 años o más; los grandes contribuyentes, a los que se les perdonaban los impuestos, ahora han pagado más de 30 mil millones de pesos que adeudaban al erario, la inversión extranjera directa está en márgenes históricos, el peso se ha apreciado, no hemos tenido las terribles devaluaciones, como las zedillistas o lopezportillistas, el empleo se va recuperando, aunque los opositores atribuyen a este Gobierno el desempleo olvidando intencionalmente la crisis mundial por el COVID, los datos revelan una buena gestión de política económica.

Estos datos dejan ver que tenemos un Gobierno federal cuyo mandato está al servicio y el beneficio de las mayorías y eso tiene rebosantes de odio a los que antes, en el pasado el 1% se enriquecían sin pausa y con ellos sus voceros.

El Gobierno federal está invirtiendo en obra pública, ahí está el Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles el descalificado por los fifis; con muchos problemas avanza el Tren Maya y es una obra pública —que dará un gran impulso a una zona olvidada y abandonada durante todo el siglo 20 por los Gobiernos del PRIAN, que conectará Chiapas, Tabasco, Campeche, Yucatán y Quintana Roo— es además un tren eléctrico, turístico y de carga que contribuirá a la no contaminación, será una inversión de 230 mil millones de pesos; está también la refinería de Dos Bocas que producirá 340 mil barriles diarios y costará 250 mil millones de pesos y además creará 75 mil empleos; cabe recordar que Felipe Calderón prometió construir una refinería y dejó solo una barda en Tula la que ahora será un hospital de especialidades avalado por el IMSS.

Si nos referimos a la política social, cuál presidente se ocupó de los adultos mayores, ahora todos los de 65 y más reciben pensión universal mensual lo que a muchos les permite tener al menos dos comidas al día, es un reconocimiento a una vida de trabajo, los discapacitados, los jóvenes cuentan con becas para estudiar, las mujeres que dan a luz tienen también un subsidio mientras sus bebes llegan a los 4 años, el programa Sembrando Vida ha sido reconocido internacionalmente, en fin nunca había tenido el país una política social tan variada e importante como la de AMLO.

Los que aducen que AMLO actúa por caprichos, olvidan que hablan de un presidente que mantiene una preferencia arriba del 60 % de la población, que fue electo por más de 50 millones de electores en 2018 y que trabaja desde las cinco de la mañana con todo y pandemia cuando Calderón y Peña comenzaban a las 12 del día.

El Consejo Local del Instituto Nacional Electoral pidió que se retirara el video en el que el gobernador de Coahuila solicitaba a la militancia de su partido no acudir a la revocación de mandato y se le aplicaran al mandatario medidas cautelares, es de aplaudirse la oportuna intervención del Consejo para que la ley se respete.

El controvertido ejercicio de la revocación ha sido objeto de sesudos debates, deliberaciones y disputas que desde mi punto de vista son sanos, significan intercambios que ilustran a la ciudadanía, además ayudan a esclarecer las conveniencias, los perjuicios o improcedencias de ese proceso puesto en marcha a regañadientes por el INE responsable de su aplicación, con la recolección de firmas de ciudadanos durante el 1 de noviembre al 15 de diciembre de 2021 para determinar su procedencia o no.

Licenciada en sociología por la UANE, Saltillo. Ha cursado estudios de Maestría en sociología, con especialidad en ciencia política, UNAM. Posee varios diplomados, entre los que destacan Análisis Político, en la UIA; El debate nacional, en UANL; Formación de educadores para la democracia, en el IFE; Psicología de género y procuración de justicia. Colabora en Espacio 4, Vanguardia y en otros medios de comunicación.

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