¿Qué se necesita para ser candidato?

La prueba para ubicar al candidato que compita por la gubernatura del Estado en sustitución de Miguel Riquelme en el 2023, es necesario que se ponga en práctica una operación política que lo defina para ese propósito, la cual deberá estar sustentada la respuesta en base, claro, al aprendizaje vivido que le dé una fuerza para la competición, sin agregarle ni positivos ni negativos, sino que con lupa se analice objetivamente sin contemplaciones la expertis que posea según el desempeño observado como administrador público.

Algunos de los rostros que ya han asomado y que han sido desvelados en medios de comunicación desde el año anterior 2021, entre ellos yo mismo —disculpe que hable en primera persona—, que lo publiqué el 8 de octubre de ese año 2021 en mi columna «En serio» titulada «Saber escoger a los candidatos» en donde me refiero a un miembro de Morena avalado por López Obrador que vendría con toda la fuerza y por supuesto con todo el dinero necesario proporcionado por el Gobierno Federal y no por Morena, partido cuyas peleas intestinas en las que las confrontaciones han contribuido a carcomer las entrañas de manera que puedan demeritar los criterios para seleccionar a sus candidatos.

El presunto candidato morenista en una reciente entrevista divulgada en las redes sociales manifiesta el estilo de los discursos de López Obrador que esconde claridades y obviedades, ya que imitando a su mecenas en sus declaraciones dice que el presidente no es una persona que reprima, solo que aquí conviene preguntar: ¿no reprime a los que no piensan igual que él?, ¿no reprime a los periodistas?, ¿a los adinerados?, ¿a los intelectuales que quiso encarcelar? Todas esas actitudes se llaman trastornos delirantes, ¿por qué ocultar lo que se ve?

Eso es trabajar en la oscuridad.

El escogido es necesario que refleje la verdad en sus dichos y en sus hechos que son producto de sus antecedentes políticos, pues el puesto demanda un altísimo coeficiente de integridad al ser recipiendario para ejercer una política de altura, además de concentrador de conocimientos suficientes que reditúen en trabajos bien hechos, pues no solo se trata de sentarse y ordenar en forma imperativa en un espacio que para el lado que mire el panorama le sea desconocido.

La imposición morenista que se sepa no partirá de su partido como candidato a la gubernatura con la certeza de ganar a como dé lugar mediante estrategias no muy claras, pues si es así acarrearía una desvinculación con los electores, pues con esos procedimientos generaría un atraso en la democracia en lugar de un avance que le redituara a la población, pues las ausencias prolongadas dan lugar al desconocimiento de su persona y por consiguiente a la desconfianza.

Es cierto, existe el derecho a aspirar a ese puesto que su partido, su partido digo, puede o no conceder, pero en su caso es muy claro que esa intención no le pertenece a usted, sino al mandato del presidente que se ha propuesto desaparecer al Partido Revolucionario Institucional (PRI) y que Morena se constituya en un partido hegemónico, como fue el PRI del que tanto recela.

Para que ese derecho sea legítimo debe estar sustentado en demostrar una supremacía en todos los aspectos que le otorgue ventaja sobre otros candidatos, que abracen también el derecho de jugar por el mismo sitio y no dar lugar a que le pregunten, ¿y usted quién es?

Cuando se desea hacer uso de un derecho político al que se supone se puede tener por merecimientos propios, estos deben poseer características notables como ostentar una efectiva concurrencia con la ciudadanía, que con ausencias no se logra, demostrar una experiencia adquirida por años dentro del ambiente político con resultados exitosos, tener buenas relaciones con grupos representativos de la población, cuyo entorno influya en la solución de problemas, una relación sana con empresarios que son los que aportan los recursos, vía impuestos, para que el gobierno los administre con efectos de llevar obra social y de infraestructura para el beneficio de la ciudadanía, en fin.

¿Podríamos saber si cumple con eso? Lo digo, en serio.

Autor invitado.

Deja un comentario