¿Ya estás dormida?
Si es así,
Duerme.
Y mañana sé fuerte
Como la mujer que eres
Como el punto de comparación a toda mujer que eres para mí,
Como el fuego radiante que se refleja ante la adversidad de los tiempos.
Como así te me has presentado a la vida en que te conocí
Siempre fuerte,
valiente,
Sin miedo.
Donde no hay adversario,
Ni muerte
Ni vida
Ni sistema social.
Solo eres tú
Con la grandeza reflejada en esa mirada noble y bestial
De amor «puro».
Siempre:
De pie,
De frente,
Y hacia delante.
Por amor.
Y si me permites…
Hay mil palabras para describirte;
Pero el amor no es tan libre,
En ocasiones debe ser discreto.
Es andar en silencio,
Como si nada pasara…
Como si la verdad debiera pasar desapercibida,
Y el tiempo sin sentido.
Así,
Nomás
Caminando
Sufriendo
Extrañando
Dejando pasar los años
Y seguir igual…
Y uno experimenta.
El círculo sigue dando vueltas
Y ya te miro
Te observo
De hecho,
Te analizo
Y te pienso.
¡Ella es!
Eres tú.
¡Dame vida a otra mujer!
Preséntame otra ideología
Y en los manjares de la verdad
Caes tú
Tan perfecta
Con tus ojos
Tus ojos
Polonio Lecumberri
Ha sido privado de libertad, busca expresarse a través de diferentes géneros literarios y periodísticos, exige respeto a los derechos humanos de todas las personas pero sobre todo de las y los presos; se interesa por que la Universidad entre a las prisiones, y que se eliminen las revisiones intimidatorias a mujeres madres, hermanas, hijas y esposas de quienes están en la cárcel.