El voto de los estados guinda, clave en la elección presidencial

El partido del presidente López Obrador podría ganar también el 2 de junio la mayoría de las gubernaturas en juego y el Congreso de la Unión como ocurrió en 2018. Claudia Sheinbaum aventaja a Xóchitl Gálvez en intención de voto (58/34%) y en la percepción ciudadana (65/15%). El bloque opositor, sin respuesta

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Guanajuato, la cara sucia del PAN; el más violento

El PAN obtuvo su primera gubernatura en 1989, medio siglo después de su fundación, no sin antes soportar múltiples fraudes. A Morena le llevó solo cuatro años, pero en su caso no ganó uno, sino cinco estados en 2018. Acción Nacional debió esperar todavía más de una década para ocupar la presidencia; y Morena, ya como partido, menos de un lustro. El agotamiento del bipartidismo, encabezado por el PRI, la acumulación de agravios y el liderazgo carismático de Andrés Manuel López Obrador se conjugaron para modificar el rumbo del país. La presidencia de la república, las ocho gubernaturas y la jefatura de Gobierno de Ciudad de México, disputadas hace un sexenio, se renovarán de nuevo el 2 de junio. En el mismo proceso se nombrarán también 500 diputados federales, 128 senadores y otros cargos. Será la primera prueba para la 4T como proyecto transexenal.

Morena preside Ciudad de México y cinco de los ocho estados que elegirán gobernador (Veracruz, Puebla, Chiapas, Morelos y Tabasco); Acción Nacional, dos (Guanajuato y Yucatán) y Movimiento Ciudadano, uno (Jalisco). El PAN, PRI y PRD afrontarán juntos a la maquinaria del poder. Sin embargo, las nominaciones del tripartito generaron conflictos. Adrián Ruvalcaba renunció al PRI tras la imposición de Santiago Taboada (PAN) para la jefatura de Gobierno de Ciudad de México. El exalcalde de Cuajimalpa pidió a Xóchitl Gálvez, aspirante presidencial del frente opositor, «no ser parte del dedazo», pero fue ignorado. Ahora forma parte del equipo de Claudia Sheinbaum, favorita para suceder a AMLO.

La Fiscalía de CDMX investigó a Taboada por su relación con el cartel inmobiliario de la alcaldía de Benito Juárez, de la cual se separó para buscar la jefatura del Gobierno capitalino. La red autorizaba la construcción de edificios a cambio de departamentos y dinero. Christian Von Roehrich (PAN), alcalde de la misma demarcación en el periodo 2015-2018, cayó en manos de la policía el 20 de abril pasado cuando intentaba cruzar a Estados Unidos por la frontera Reynosa-MacAllen. El presunto cerebro de la organización, Nicias Aridjis Vázquez, exdirector de Obras Públicas y Desarrollo Urbano, fue sentenciado a tres años de prisión por enriquecimiento ilícito. Luis Vizcaíno, exdirector Jurídico y de Gobierno, otros de los cabecillas, pasará cuatro años entre rejas por la misma causa.

En las elecciones de 2021 la alianza PRI-PAN-PRD resultó exitosa en CDMX, pues desplazó a Morena en cuatro alcaldías importantes y se hizo con el control de la asamblea legislativa. Empero, la candidatura de Taboada y los escándalos de corrupción revirtieron la tendencia favorable al bloque opositor. Clara Brugada (Morena), alcaldesa de Iztapalapa con licencia, aventaja por 16 puntos a Taboada (Enkoll-El País, 26.02.24). CDMX es el termómetro político nacional. El triunfo de Cuauhtémoc Cárdenas (PRD) en 1977 anticipó la derrota del PRI en las presidenciales de 2000. Sin embargo, la oligarquía y las nomenklaturas partidistas inclinaron la balanza hacia el derechista Vicente Fox (PAN).

Morena resolvió el proceso para nombrar candidato sin conflictuarse. Omar Harfuch venció en las encuestas, pero la postulación recayó en Brugada por cuestiones de género. Harfuch aceptó el sacrificio y se incorporó al equipo de campaña de Claudia Sheinbaum, con quien había colaborado en CDMX como secretario de Seguridad Ciudadana. En el PAN y el PRI, las intrigas cupulares provocaron renuncias, malestar y exhibieron la escasa o nula influencia de Xóchitl Gálvez en el diseño de una estrategia ganadora. La nominación de la política hidalguense fue cuestionada desde un principio por saltarse la etapa final del proceso y dejar fuera a Beatriz Paredes, el perfil más competitivo y con mayor empaque y experiencia.

Un frente descorazonado

Morena aventaja en la mayoría de los estados que elegirán gobernador el 2 de junio. El PAN podría conservar Guanajuato, en su poder desde hace 33 años, con Libia García, y con dificultad Yucatán, donde postuló a Renán Barrera. El frente opositor postuló a priistas en Veracruz, Jalisco, Morelos y Tabasco, y en Chiapas a una militante del PRD. En Morelos la nominación de la senadora con licencia Lucía Meza (hasta hace poco militante de Morena) dividió al PAN, pero finalmente terminó por aceptarla. La coalición «Sigamos Haciendo Historia» (Morena-PT-Verde) expondrá la media decena de entidades que obtuvo en 2018 (Ciudad de México, Veracruz, Tabasco, Chiapas y Morelos) además de Puebla.

Los desarreglos en los estados también inciden en la campaña presidencial de la alianza «Fuerza y Corazón por México» (PAN-PRI-PRD). Manuel Clouthier, hijo del excandidato presidencial homónimo, objetó la participación de Héctor Melesio Cuén, líder del Partido Sinaloense (PAS), en la estructura electoral de Xóchitl Gálvez. «Los que nos proponen que van a “salvar” a México quitando a Morena quieren “salvar” a Sinaloa dejándonos en manos del corrupto Cuén», publicó el exdiputado federal independiente en redes sociales (Reforma, 24.11.23). De haber sido Adán Augusto López el candidato presidencial de Morena, el PAS habría apoyado a Gálvez.

La elección en Yucatán se le podría complicar al PAN por varias razones: 1) la popularidad del candidato de Morena, Joaquín «Huacho» Díaz Mena; 2) el enfado entre la militancia por la eliminación del gobernador de turno, Mauricio Vila Dosal, de la competencia por la presidencia; y 3) la renuncia de Carlos Ramírez Marín al PRI, relegado en varias sucesiones estatales. Alcalde de San Felipe, diputado local y federal y consejero nacional del PAN, Díaz se impuso en las encuestas a cinco aspirantes de Morena. El alistamiento del senador Ramírez Marín en el Partido Verde, aliado de Morena, después de haber sido diputado federal y presidente de la Cámara Baja por el PRI, supone un riesgo para la coalición oficialista.

El exsecretario de Gobernación, Miguel Osorio, y más de 300 liderazgos (entre legisladores y exgobernadores) dimitieron al PRI el año pasado en protesta por el secuestro de la institución y la soberbia de la cúpula encabezada por Alejandro Moreno. El político hidalguense anticipó una fuga masiva de cuadros del frente opositor por haberle escamoteado la candidatura al Gobierno de Ciudad de México a Adrián Ruvalcaba para imponer al panista Santiago Taboada. «Las miles de renuncias al PRI no son en vano y veremos muchas más, porque no se puede hacer buena política ni partido o construir propuestas de gobierno teniendo una dirigencia que busca someter, callar reclamos e ignorar a quien piensa distinto», acusó en la red social X.

Claudia Ruiz Massieu, senadora y exsecretaria general del PRI, adelantó su deseo de adherirse a otras siglas, mas no a Morena. «Con Movimiento Ciudadano (MC) sí; es un partido con el que siempre he simpatizado y tengo muchas coincidencias (…), soy una mujer liberal, progresista y con una convicción democrática muy fuerte (…), en ese sentido me gusta la forma en que hace política». Ruiz Massieu será diputada federal por MC. Su padre, Francisco Ruiz Massieu, fue asesinado en 1994 cuando era el segundo de a bordo en el PRI. La exsecretaria de Relaciones Exteriores y de Turismo es la coordinadora del partido naranja en Guerrero, donde el apellido ocupó ya la gubernatura. En Oaxaca la postulación del exgobernador Alejandro Murat para el Senado, por Morena, también le restará votos al PRI y por extensión al PAN y a Xóchitl Gálvez.

Angustia y derrotismo

Antes de convertirse en la candidata con mayores probabilidades de ser la primera presidenta del país, Claudia Sheinbaum (Morena) se fogueó cinco años en Ciudad de México, la sexta metrópoli más poblada del planeta (ONU-Hábitat) y una de las más complejas para gobernar. Sheinbaum ganó la jefatura de Gobierno capitalino en 2018 tras derrotar a Alejandra Barrales (PAN-PRD-MC) y a Mikel Arriola (PRI). En una nación machista y misógina como la nuestra, el ascenso de una mujer a Palacio Nacional impulsaría la política de igualdad de género. El año pasado, México ocupó el segundo puesto en feminicidios en América Latina (832, Secretaría de Seguridad Pública), solo por debajo de Brasil (1,706, Mapa Latinoamericano de Feminicidios). La mayor tasa de asesinatos de mujeres y niñas (6.47 por cada 100 mil habitantes, ONU) corresponde a Honduras.

Sheinbaum aventaja no solo en las encuestas, sino también en la percepción ciudadana. La presidencia se decidirá el 2 de junio en las urnas, no antes, pero mientras la candidata del frente PAN-PRI-PRD, Xóchitl Gálvez, sea vista en un lejano segundo lugar, las tendencias difícilmente variarán a su favor. El lema de la panista «Por un México sin miedo» no opaca la violencia de la guerra interminable contra el narcotráfico iniciada por Felipe Calderón. Tampoco suma voto que el jurado de una Corte de Nueva York haya declarado culpable a Genaro García Luna, responsable de la estrategia de seguridad, de haber brindado protección y recibido sobornos del cartel de Sinaloa.

«Si Gálvez no recupera el aliento, tampoco podrá ayudar a los candidatos a diputados, senadores y gobernadores del bloque antioficialista».

Los padrinos de Gálvez acusan al Gobierno del presidente López Obrador de sembrar la idea de una derrota inminente de la oposición a través de los medios de comunicación, pero la realidad los refuta. La senadora con licencia perdió el quid que la catapultó. Si Gálvez no recupera el aliento, tampoco podrá ayudar a los candidatos a diputados, senadores y gobernadores del bloque antioficialista. Morena tiene más probabilidades de repetir la hazaña de 2018 cuando, además de la presidencia, obtuvo cinco gubernaturas (de nueve) y la mayoría en las Cámaras de Diputados y de Senadores. La última vez que el PRI logró un triunfo así de claro, aunque cuestionado, fue en 1994. Hace seis años, el «efecto AMLO» favoreció a un elevado número de aspirantes de Morena y sus aliados. En el caso del PRI y el PAN, José Antonio Meade y Ricardo Anaya fueron un lastre.

El fenómeno podría reproducirse el 2 de junio con Sheinbaum y con Gálvez, de no ocurrir un cambio brusco en la percepción pública y en las intenciones de voto, lo cual, en las circunstancias actuales, no se vislumbra. Morena tiene ventajas adicionales: el 70% de la población nacional se concentra los 23 estados donde ondea su bandera; la popularidad del presidente López Obrador (73%, Reforma 19.93.24) y el fracaso de las oposiciones y de los grupos de interés que pronosticaron la debacle del país bajo el Gobierno de la 4T.

El PRI y el PAN perdieron la presidencia en las sucesiones previas principalmente por la violencia, los escándalos de corrupción, el hartazgo ciudadano y la postulación de malos candidatos (Meade y Anaya). Gálvez tampoco es la más adecuada para las circunstancias. Su estancamiento en la intención de voto obedece a su improvisación como candidata. Los intereses partidistas, la presión de los poderes fácticos y el descrédito de Alejandro Moreno y Marko Cortés conjuran en su contra. El derrotismo y la angustia campean en el frente opositor. La idea de que la 4T se consolide disgusta a muchos, pero los partidos tradicionales y las élites se encargaron de dejarle el campo abierto al presidente. En vez de elaborar propuestas para atraerse a los sectores históricamente olvidados, cayeron en el juego de la polarización. E4

Gubernaturas y CDMX, en juego

Morena

  • Ciudad de México
  • Veracruz
  • Puebla
  • Morelos
  • Tabasco

PAN

  • Guanajuato
  • Yucatán

Movimiento Ciudadano

  • Jalisco

Domar al tigre, la misión imposible de Evelyn Salgado

La morenista preside uno de los estados más violentos y peliagudos del país. Los gobernadores duran en el cargo un promedio de tres años

Guerrero es uno de los estados más convulsos y conflictivos del país, y uno de los más enrevesados para gobernar. El abandono oficial y el autoritarismo incitaron a la lucha armada en las décadas de los 60 y los 70. Las guerrillas de la Sierra Madre del Sur fueron reprimidas por el ejército a sangre y fuego. Lucio Cabañas Barrientos y Genaro Vázquez Rojas (egresados de la Escuela Normal de Ayotzinapa) fundaron el Partido de los Pobres y la Asociación Nacional Revolucionaria. Ambos murieron durante la Guerra Sucia; Cabañas, después del secuestro de Rubén Figueroa padre, quien más tarde sería gobernador; y Vázquez, tras un accidente de circulación por carretera en condiciones no aclaradas.

Guerrero padece dos plagas inherentes a la pobreza secular y a los Gobiernos venales e ineptos: narcotráfico y violencia. La desaparición forzada y la supuesta incineración de 43 estudiantes de Ayotzinapa atizaron los conflictos, cuyo final no se vislumbra. Los eventos ocurrieron entre la noche del 26 y la madrugada del 27 de septiembre de 2014 por la disputa de territorios entre bandas rivales y una aparente confusión. Otro crimen de Estado se cometió el 28 de junio de 1995 en el vado de Aguas Blancas, donde la policía asesinó a 17 campesinos e hirió de gravedad a 23. La masacre forzó la renuncia del gobernador Rubén Figueroa hijo.

La inestabilidad política en Guerrero la refleja el número de gobernadores: 30 en un lapso de 95 años, contados a partir de la fundación del PRI en 1929. El promedio es de uno cada 3.1 años. Adrián Castrejón, su primer gobernador, fue desaforado después de una reyerta a tiros en el Congreso. Su sucesor Gabriel Guevara corrió la misma suerte por una disputa en la Cámara de Diputados. Alberto F. Berber, Alejandro Gómez Maganda y Raúl Caballero Aburto cayeron al declararse la desaparición de poderes en el estado. El primero en cumplir el periodo completo, entonces de cuatro años, fue Gerardo Catalán. (Con información de Wikipedia).

Tras un periodo de aparente estabilidad, el gobernador Caritino Maldonado falleció en 1971 en un extraño accidente. El helicóptero donde viajaba (propiedad de su homólogo de Estado de México, Carlos Hank González) se estrelló poco antes de aterrizar en Chilpancingo. El interino (Roberto Rodríguez) y el sustituto (Israel Nogueda) tampoco concluyeron su gestión. Luego de tres administraciones completas encabezadas por priistas, el último de los cuales fue Francisco Ruiz Massieu (asesinado en 1994), Guerrero dio paso a la alternancia en 2005 con Zeferino Torreblanca (PRD). Le sucedió el expriista Ángel Aguirre Rivero (sustituto de Rubén Figueroa en 1996), quien renunció por el caso Ayotzinapa. Después de cuatro relevos intermitentes en el despacho del gobernador, el PRI recuperó el poder en 2015 con Héctor Astudillo.

Evelyn Salgado (Morena) es la primera mujer que ejerce el cargo en esa entidad marcada por el caciquismo, la corrupción y el desgobierno. En 2021 le ganó por una cabeza al priista Mario Moreno Arcos, quien ahora es candidato a senador por Movimiento Ciudadano. Morena postuló a Salgado luego de que el INE anuló la candidatura de su padre, Félix Salgado Macedonio, por no informar sobre los gastos de su precampaña. La violencia en Guerrero, la presión del movimiento Ayotzinapa y el asesinato del estudiante Yanqui Kothan Gómez, han puesto contra las cuerdas a la gobernadora. Empero, el aparato evitará a toda costa su caída para no sentar un precedente y evitar un mal mayor. E4


Guanajuato, la cara sucia del PAN; el más violento

Gálvez presume a Rubén Moreira en su gira por Coahuila, el exgobernador acusado en la Corte Penal Internacional de crímenes de lesa humanidad

El PAN gobierna Guanajuato desde 1991, cuando Carlos Salinas de Gortari sacrificó al priista Ramón Aguirre para imponer en su lugar, como interino, a Carlos Medina Plascencia. La entidad del Bajío es la más violenta del país (Infobae, 20.02.24) y la que registró el mayor número de masacres el año pasado (44). Le siguen Guerrero (38) y Zacatecas (33) gobernados por Morena (Dallas News, 26.12.03). Esa es una de las herencias de Diego Sinhue Rodríguez, quien entregará el poder el 28 de septiembre próximo a su correligionaria Libia García Muñoz Ledo o a la morenista Alma Alcaraz Hernández. Guanajuato es por ahora el único estado seguro para Acción Nacional, pues las encuestas electorales en Yucatán están divididas.

De acuerdo con la secretaria de Seguridad y Protección Ciudadana, Rosa Icela Rodríguez, los homicidios aumentaron 5% en enero para totalizar 2 mil 433. Los estados con mayor número de casos son Guanajuato (250), Estado de México (222), Baja California (196), Michoacán (156) y Jalisco (153). Sin embargo, la atención mediática está centrada en Guerrero y Zacatecas, donde por primera vez Morena ejerce el mando después de haber vencido al PRI. No es casual que así sea, pues por razones electoreras conviene apartar los reflectores de los territorios panistas.

El 15 de marzo, en Saltillo, la candidata de la coalición «Fuerza y Corazón por México» (PRI-PAN-PRD), Xóchitl Gálvez, pidió ver «cómo están Guerrero, Zacatecas y Michoacán». En Guanajuato y Chihuahua las cosas están peor. Por esa razón puso de ejemplo a Yucatán y Coahuila, cuyo «modelo» ofreció aplicar en todo el país, en caso de ganar la presidencial. Empero, eso se vuelve cada vez más remota conforme se aproximan las votaciones del 2 de junio. «La probabilidad de que la morenista Claudia Sheinbaum gane la elección (…) es muy alta. (…) El 65% de los encuestados cree que ella ganará la elección e, incluso, un 61% considera factible que obtenga una votación superior a la que AMLO logró en 2018», advierte la encuesta de Grupo Reforma difundida el 19 de marzo.

Gálvez mentó la soga en casa del ahorcado cuando mencionó al exgobernador Rubén Moreira y a su equipo como los artífices del modelo Coahuila. La pacificación del estado se debe en gran medida a las fuerzas armadas y a la sociedad civil. Las masacres en Allende y Piedras Negras y las miles de desapariciones forzadas en La Laguna y otras regiones, ocurridas durante el moreirato, figuran en la denuncia del Centro de Derechos Humanos Fray Juan de Larios, Familias Unidas en Busca de Personas Desaparecidas y la Federación Internacional de Derechos Humanos presentada ante la Corte Penal Internacional el 8 de julio de 2017.

La comunicación «México: Asesinatos, desapariciones y torturas en Coahuila de Zaragoza constituyen crímenes de lesa humanidad» señala a los hermanos Humberto y Rubén Moreira —cuya colaboración presume Gálvez— «por su presunta complicidad en los atroces crímenes cometidos durante sus Gobiernos» (Proceso, 08.07.17). Si la candidata opositora espera votos de Rubén, puede remitirse a las elecciones de 2017 en el estado. El PRI estuvo a punto de perder la gubernatura por los agravios del clan a una sociedad indefensa y agraviada, no solo por las masacres y la violencia, sino también por la deuda de 40 mil millones de pesos. Una parte significativa de los caudales fue a parar a campañas políticas del PRI y al bolsillo de funcionarios inescrupulosos. E4

Torreón, 1955. Se inició en los talleres de La Opinión y después recorrió el escalafón en la redacción del mismo diario. Corresponsal de Televisa y del periódico Uno más Uno (1974-81). Dirigió el programa “Última hora” en el Canal 2 de Torreón. Director del diario Noticias (1983-1988). De 1988 a 1993 fue director de Comunicación Social del gobierno del estado. Cofundador del catorcenario Espacio 4, en 1995. Ha publicado en Vanguardia y El Sol del Norte de Saltillo, La Opinión Milenio y Zócalo; y participa en el Canal 9 y en el Grupo Radio Estéreo Mayrán de Torreón. Es director de Espacio 4 desde 1998.

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