Cuando les platiqué a mis padres de este libro se les iluminaron los ojos por los recuerdos que les traía ese nombre, y es que Joaquín Murrieta ha hecho historia por generaciones, teniendo referencias en libros, películas, cine y recientemente en una serie.
Para los mexicanos, Joaquín Murrieta es como su Robin Hood y no precisamente el de Disney. No luchó por defender la libertad de su gente, pero aun así terminó convirtiéndose en un símbolo de resistencia. Siendo sinónimo de astucia, inteligencia y un respiro de justicia para los mexicanos.
Ustedes dirán. ¿Y quién es ese? Cuenta la historia que, nacido en 1829, en el municipio de Álamos, en Sonora, Murrieta es uno de los personajes más icónicos de las leyendas mexicanas. En su tiempo representó el símbolo de la resistencia latinoamericana ante la dominación gringa que se daba en tierras californianas. Para ubicarnos mejor, se nos narra después de la venta de parte importante del territorio mexicano a Estados Unidos.
Joaquín tomó relevancia durante la conocida Fiebre del oro, en la década de 1850. Y como sucede con todos los personajes de leyenda, sobre su origen se han dicho muchas cosas. Lo comparaban con un fantasma al estar en muchos lugares en diferentes partes al mismo tiempo. ¿Un Doctor Strange del pasado?
Recientemente el escritor mexicano Alejandro Rosas se animó a contar la historia en un libro con editorial Planeta, que ha servido de base para una de las producciones de Prime Video.
Sin Murrieta, la leyenda de El Zorro jamás hubiese existido. Este sujeto, que acostumbraba robar a los colonizadores y el botín de sus atracos lo repartía a todo el pueblo, a quienes más lo necesitaban, tal vez iniciaba a pasar desapercibido, pero ahora todo el mundo volverá a saber de él.
Alejandro Rosas, quien se ha especializado como divulgador de historia, ha publicado la trilogía Érase una vez México (2014), México Bizarro 1 y 2 (2017 y 2019) y Morenadas (2022) entre otros títulos. En este libro Rosas presenta a Joaquín, señala momentos relevantes dentro de su desarrollo, nos presenta a la dueña de su corazón, así como el porqué del odio de Murrieta hacia los norteamericanos.
En las cerca de 184 páginas que componen La cabeza de Joaquín Murrieta, Alejandro Rosas cuenta la historia real del personaje, uno de los antihéroes mexicanos más célebres (además que muy joven), quien se propuso ser «el azote de los gringos», a partir de una minuciosa investigación con documentos, que le permitieron caracterizarle de la manera más fiel posible.