Lo que no se puede decir

Se puede decir… que AMLO hizo un llamado a la comunidad «judía»

Pero no se puede decir… que lo hizo para que sean un medio de «presión». Al no existir un tratado de extradición entre México e Israel, se ha tornado difícil para  que Tomás Zerón que está allá refugiado, sea extraditado de ese país para acá, por eso a través de la mañanera les pidió a los israelíes que viven con nosotros, para que intervengan ante su Gobierno y apoyen a las autoridades mexicanas, para que ese personaje sea enviado a México, donde se le requiere, por ser una pieza clave en el sonado caso de los 43 estudiantes «desaparecidos» de Ayotzinapa.

Se puede decir… que Felipe Calderón siente pasos en la «azotea»

Pero no se puede decir… que por eso se fue para «España». El expresidente mexicano se dice perseguido, acusado y atacado sin razón alguna por parte de la 4T, y no hay día en que AMLO no lo mencione en sus mañaneras, al grado que lo ha invitado a que asista a una de ellas, con el atractivo que solo él hable y sin que nadie lo interrogue, y exponga con toda libertad su versión sobre la relación que tuvo con Genaro García Luna, y limpie de una vez por todas su prestigio personal que está por los suelos, porque si no, recuerde que el que «calla» otorga.

Se puede decir… que se apagó otra «luminaria»

Pero no se puede decir… que su legado existirá toda la «vida». El polifacético actor Ignacio López Tarso dejó de existir a los 98 años de edad, vivió toda una vida de altas y bajas, hasta alcanzar el estrellato, con su película llamada Macario, cuando estaba en la plenitud de su vida, así como con otras más, y siguió hilvanando éxitos tras éxitos, y jamás dejó de actuar, ni en su vejez, porque para él su pasión era el teatro, y no había días de descanso, ni tampoco su avanzada edad fue un obstáculo para no trabajar, ya que siempre fue un «profesional» de la escena.

Se puede decir… que la violencia no «para».

Pero no se puede decir… que aparece aquí, allá y «acuyá». Sin tomar en cuenta la violencia en contra de las mujeres, resulta que la SEDENA ha escenificado una matanza terrorífica allá en Tamaulipas, en contra de unos jóvenes, a los que asesinaron a balazos, sin medir las consecuencias, y sin aplicar los protocolos que se deben de dar antes de cualquier orden que den, o sea que actuaron a tontas y a locas, y como son hechos locales, a los sardos asesinos se les debe de juzgar y sentenciar por autoridades locales y no militares, porque «éstas» los protegerán.

Se puede decir… que habrá una feria de «empleos»

Pero no se puede decir… que eso sucederá con la llegada de «Tesla». La mega armadora de vehículos eléctricos que ya se está construyendo en Monterrey, y que es el imán de cientos de fuentes de trabajo para empleados, obreros y profesionistas, y que viene a aliviar la economía, no solo de ellos, sino también de Nuevo León y del norte de México, la cual llegó en el momento en que tanto se necesitaba una empresa de tal envergadura, para enfrentar la crisis de empleos que agobia al país, y que el Estado mexicano presume que crea, sin ser «nada» cierto.

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