Morena lidera la carrera presidencial; el PRI, PAN y PRD dan palos de ciego

Dos terceras partes de los electores prefieren que la coalición Va por México se extinga y que los partidos compitan solos en las elecciones de 2024, revela encuesta. Pese a los fracasos de la 4T, AMLO mantiene una alta aprobación. Claudia Sheinbaum y Marcelo Ebrard encabezan las preferencias

Gobernadores, clave en la elección del 24

Alternancia política y visos de justicia en los estados

Cuatro años preciosos perdieron las oposiciones tras su derrota en la elección presidencial de 2018 frente a Morena. En ese lapso, el movimiento fundado por Andrés Manuel López Obrador pasó de ser, de un partido emergente, a la primera fuerza política nacional. El PRI, PAN, PRD y la oligarquía dedicaron el tiempo a denostar y boicotear al Gobierno de izquierda, sin ningún resultado hasta el momento. En vez de identificar las causas de su fracaso elección tras elección, de corregir fallos, de reconciliarse con la ciudadanía, de proponer una agenda alternativa y de formar liderazgos a la altura de las nuevas circunstancias, revivieron el Pacto por México de Peña Nieto para armar la coalición electorera Va por México, cuyo objetivo, carente de sustento, consiste en recuperar el poder por el poder. Hoy la alianza está herida de muerte por la propensión del PRI a ser satélite del príncipe de turno.

No es casual entonces que Morena lidere la intención de voto de la carrera presidencial con el 46% de las preferencias. El PAN ocupa el segundo lugar (19%) y el PRI es tercero (15%), según la encuesta de Reforma difundida el 1 de septiembre, justo cuando López Obrador presentaba su cuarto informe de Gobierno. Antes de la crisis causada por la iniciativa del PRI para que las fuerzas armadas desarrollen tareas de seguridad pública hasta 2028, cuatro años más de lo previsto, Va por México ya presentaba signos de agonía por falta de apoyo ciudadano. El 67% prefiere que los partidos compitan separadamente por la presidencia, de acuerdo con la indagatoria.

En menos de dos años que faltan para elegir al sucesor de AMLO, cuya gestión terminará el 30 de septiembre de 2024 por una reforma que acortó el sexenio en dos meses por única ocasión, las oposiciones difícilmente podrán remontar la desventaja. Previo a su distanciamiento con el PRI, Acción Nacional presionaba para que el candidato de Va por México surgiera de sus filas. La situación del PRI se complica aún más sin alianza, pues, fuera de Beatriz Paredes, no tiene figuras con el suficiente peso y solidez para competir. El desempeño de Alejandro Moreno y de su segundo de abordo, Rubén Moreira, cuyo pacto con López Obrador no los exime de responsabilidades penales por los delitos de corrupción imputados por la Fiscalía General de la República (y la de Campeche, en el caso del primero), ha sido desastroso para el viejo partido hegemónico.

Sin el paraguas de Va por México, el PRI terminaría de desaparecer o sería absorbido por Morena. El desprestigio de las siglas tricolores registra hoy sus cotas más altas. Solas o en alianza, representan un lastre. La pesquisa de Reforma al respecto es irrefutable: el 39% nunca votaría por el PRI; el 13% por Morena y el 10% por el PAN. El nombre del Partido Revolucionario se asocia con corrupción, abuso de poder e impunidad. Cuatro exgobernadores de esa formación (Javier Duarte, Roberto Borge, César Duarte y Roberto Sandoval) están actualmente presos en México. Tomás Yarrington, exmandatario de Tamaulipas y aspirante presidencial en 2006, se declaró culpable de lavado de dinero ante la corte de Houston, Texas, en marzo pasado.

Sin embargo, el centro de la inquina nacional es Enrique Peña Nieto, como en su tiempo lo fue Carlos Salinas de Gortari. Enjuiciarlo sentaría un precedente contra la impunidad en las más altas esferas del poder. La conclusión del informe sobre el caso Iguala según el cual la desaparición y asesinato de 43 estudiantes de la Normal de Ayotzinapa constituyó un crimen de Estado, tiene en prisión preventiva al exfiscal general de la república, Jesús Murillo, quien, junto con las fuerzas armadas, recibía órdenes de Peña.

Teflón presidencial

Mientras el PAN, PRI y PRD pierden votos, dan palos de ciego y buscan con la lámpara de Diógenes un candidato atractivo y convincente para la sucesión del presidente de 2024, la ventaja de Morena parece insuperable. El principal activo del partido guinda es su fundador, Andrés Manuel López Obrador, cuya aprobación del 61% contrasta con los resultados de su administración, pobres en general. Para frustración de los detractores de la 4T, solo un tercio desaprueba la gestión del AMLO, dice la encuesta de Reforma. Cuatro años de crítica pertinaz, de roces con el statu quo y de yerros gubernamentales no han hecho mella en el ánimo popular.

La partitocracia tampoco levanta cabeza y en lugar de avanzar, retrocede. El rechazo de los electores está centrado en los socios de Va por México, advierte un estudio de El Financiero publicado en vísperas del cuarto informe. El PRI es el partido con el mayor número de opiniones negativas (68%). Le siguen el PAN (55%) y el PRD (59%). En la misma secuencia, las calificaciones positivas son del 20, 25 y 18%. Los partidos del Trabajo, Verde y Movimiento Ciudadano están en la mismas. A Morena tampoco le va bien, pero entre los juicios buenos y malos tiene 16 puntos a favor.

El desafecto ciudadano hacia los partidos volvió a reflejarse en las elecciones de junio pasado. El PRI, PAN y PRD perdieron en cuatro estados (Hidalgo, Oaxaca, Quintana Roo y Tamaulipas) y Morena en dos (Aguascalientes y Durango). La crisis de liderazgo afecta a todas las fuerzas políticas. Mario Delgado, Marko Cortés y Jesús Zambrano son anodinos, pero Alejandro Moreno es tóxico y sus días en la presidencia del PRI parecen estar contados. El 60% de la muestra de El Financiero, piensa que Moreno debería ser relevado.

En un escenario caracterizado por la debilidad de los partidos, el enfado ciudadano con la clase política tradicional y la escasez de alternativas para plantar cara a Morena con un candidato adecuado, surge una figura relativamente nueva: Luis Donaldo Colosio Riojas. Su imagen remite a la de su padre, del mismo nombre, asesinado en 1994 mientras hacía campaña por la presidencia (¿otro crimen de Estado impune?). Sin embargo, el alcalde de Monterrey adolece de inexperiencia, y su partido, Movimiento Ciudadano, apenas alcanza el 6% de la intención de voto (Reforma, 10.09.22).

Para lavarse la cara, el PRI experimentó en la sucesión de 2018 con un candidato «ciudadano», pero los electores no se tragaron el anzuelo. José Antonio Meade, funcionario en los Gobiernos de Vicente Fox, Felipe Calderón y Peña Nieto, representaba al establishment, los intereses del grupo gobernante y el continuismo del proyecto neoliberal repudiado en las urnas. En el proceso participó el primer aspirante independiente (Jaime Rodríguez, el Bronco), pero solo recibió el 5.2% de la votación. Margarita Zavala contendió bajo la misma figura, pero se retiró cuando la tendencia favorable a López Obrador era irreversible.

Llegar a las próximas elecciones presidenciales con al menos 22 gubernaturas (las de Coahuila y Estado de México se decidirán el año próximo) le brinda a Morena una ventaja decisiva. Claudia Sheinbaum y Marcelo Ebrard, los aspirantes mejor posicionados, ganan terreno mientras el PAN, PRI y PRD siguen pasmados y sin una ruta clara. Las encuestas afianzan la percepción de que el movimiento del presidente López Obrador retendrá el poder por seis años más. La estrategia contra la 4T, basada en la crítica vacía de propuestas, no funcionó.

Mujeres en ascenso

Si las elecciones presidenciales fueran hoy, Morena ganaría con el 55% de los votos (preferencia efectiva), 16 puntos por encima de la coalición Va por México, antes de violar el PRI la moratoria legislativa. Así lo advierte la encuesta de Enkoll, El País y W Radio publicada el 29 de agosto. Bajo el mismo parámetro, el 47% de la muestra dijo que nunca votaría por el PRI. El rechazo a Morena y al PAN es del 22% y 15%, respectivamente. Acerca de con cuál de los partidos el país «estaría mejor» en 10 temas prioritarios (programas sociales, combate a la pobreza, empleos y salarios, educación, economía, salud, combate a la corrupción y al narcotráfico, feminicidios y medio ambiente), Morena aparece por encima de todos de acuerdo con el estudio.

El dato más relevante es que el 82% de los encuestados sufragaría por una mujer para la presidencia. La proporción se eleva al 89 y al 90% en los rangos de 18 a 24 y de 25 a 34 años. Los mexicanos, como se puede observar, están de acuerdo en que el cargo de mayor responsabilidad política deje de ser monopolio de los hombres. En América Latina, 11 países han sido gobernados por mujeres, entre ellas: Michelle Bachelet (Chile), Cristina Fernández (Argentina; la actual vicepresidenta sufrió un atentado el 1 de septiembre pasado del cual resultó ilesa), Dilma Rousseff (Brasil), Violeta Barrios (Nicaragua) y Xiomara Castro (Honduras, en funciones).

La encuesta incluye a los aspirantes presidenciales de ambos géneros. Para ser la candidata de Morena, Claudia Sheinbaum es la favorita. La jefa de Gobierno de Ciudad de México supera en preferencia efectiva (48%) al secretario de Relaciones Exteriores, Marcelo Ebrard (46%) y al senador Ricardo Monreal (10%). La opción del PRI con mayor apoyo es la expresidenta de ese partido, Beatriz Paredes (51%), lejos de Miguel Osorio (23%), Enrique de la Madrid (14%) y del gobernador de Estado de México, Alfredo del Mazo (12%).

Con base en la misma variable, el 32% se decantó porque el candidato del PAN sea Ricardo Anaya. Margarita Zavala, quien también compitió por la presidencia en 2018, le pisa los talones con el 30%. La senadora Lilly Téllez tiene el 25% de las intenciones y el diputado Santiago Creel, el 13%. Ninguna mujer de Movimiento Ciudadano (MC) aparece en la pesquisa. La preferencia efectiva por el alcalde de Monterrey, Luis Donaldo Colosio Riojas, es del 59%. Los gobernadores Samuel García (Nuevo León) y Enrique Alfaro (Jalisco) no llegan ni al 20%. El más rezagado es el líder de MC, Dante Delgado (10%), exgobernador de Veracruz.

Sheinbaum es la aspirante favorita en los careos —donde ya no figura Paredes—. Por ella votaría el 54%; por Colosio, el 26% y por Anaya, el 20%. Si la elección fuera entre Sheinbaum y Téllez, las preferencias efectivas por la jefa de Gobierno aumentan al 63%; la periodista y conductora de televisión captaría el 28%. Ebrard también se impondría a Colosio, Anaya y Téllez por suficiente margen. La sucesión vuelve a pintar de guinda, y la posibilidad de que Sheinbaum releve a AMLO, es alta.

La reforma de 2019 aceleró el ascenso político de las mujeres. Los cambios en la Constitución hicieron posible la paridad total en las candidaturas a cargos de elección popular, en los poderes legislativo y judicial y en los órganos constitucionales autónomos. Cuatro de los 11 ministros de la Corte de Justicia son féminas. Hoy se tiene el mayor número de gobernadoras (nueve: siete de Morena y dos del PAN). En 2024 México también puede seguir los pasos de Alemania, Reino Unido y llevar al poder a una mujer con experiencia de Gobierno y reconocimiento internacional. E4

Intención de voto para la presidencia

Sheinbaum 54%

Ebrard. 48%

Preferencias por partido (con la respectiva foto y logotipo del partido)

Colosio        59%     (Movimiento Ciudadano)

Paredes        51%     (PRI)

Anaya          32%     (PAN)

Zavala          30%     (PAN)

Fuente: Encuesta W Radio-Enkoll-El País


Gobernadores, clave en la elección del 24

Morena controla 22 estados, el PAN cinco, el PRI tres y MC dos. Mandatarios locales, sin dinero ni influencia fuera de sus territorios

Los gobernadores controlan las maquinarias electorales de los estados. Esa situación le permitió al PRI recuperar la presidencia en 2018. Las circunstancias juegan hoy en favor de Andrés Manuel López Obrador. Morena tiene la sartén por el mango para volver realidad las encuestas que anticipan su triunfo en los comicios federales de 2024, pues su bandera ondea ya en 22 estados y el año próximo podría sumar al menos otro. La carrera presidencial se acelerará tras el cuarto informe de AMLO. El Gobierno inicia su último tercio con más sombras que luces, pero aun así la aprobación del líder de la 4T es elevada. La coraza de la legitimidad está abollada, pero no del todo desgastada.

En el contexto de la sucesión y del informe, El País, Enkoll y W Radio aplicaron la encuesta «Presidenciables 2024» del 16 y el 19 de agosto. Para el 45%, el principal problema del país es la inseguridad; el segundo, la economía (35%) y el tercero, la corrupción (20%). La mayoría de consultados (38%) relaciona la inseguridad con los asaltos, delito de competencia local, más que con el narcotráfico (13%), del ámbito federal. El robo a casa habitación (10%) tuvo más menciones que el secuestro (8%), según la pesquisa.

Con respecto a los enfrentamientos entre grupos del crimen organizado en Michoacán, Baja California, Guanajuato y Chihuahua (los dos primeros gobernados por Morena y los segundos por el PAN), el 28% señala a los mandatarios locales como responsables de evitar los hechos violentos; y al presidente López Obrador, el 22%. La Guardia Nacional, el Ejército y la secretaria de Seguridad Pública, Rosa Icela Rodríguez, ocupan los siguientes lugares con menos del 10%. La mitad considera que AMLO hace lo necesario para evitar la violencia; el 47% respondió que no.

Gobernar 22 estados le concede a Morena ventajas políticas y electorales, pero también lo pone contra las cuerdas, pues dominar la mayor parte del territorio nacional sin reducir la violencia lo exhibe como un partido incompetente. En la reciente evaluación de Grupo Reforma sobre el desempeño del presidente, la inseguridad vuelve a ser su talón de Aquiles. Para el 69% de la muestra, la mejor estrategia contra la delincuencia organizada consiste en «aplicar toda la fuerza del Estado».

La táctica de «abrazos, no balazos» recibe una aceptación de apenas el 16%. Aun así, para el 39% la política de seguridad del presidente López Obrador ha sido más efectiva que las aplicadas por Felipe Calderón (12%) y Peña Nieto (7%). En los temas de programas sociales, educación, salud, combate a la pobreza y relación con los medios de comunicación, las menciones favorables superan a las negativas. En combate a la corrupción, economía, abasto de medicamentos, seguridad, relación con los partidos y combate al crimen organizado, la situación se invierte.

A pesar de los resultados insatisfactorios de la 4T, el 68% de quienes votaron por AMLO en 2018 dijeron que volverían a sufragar por él. El 20% respondió que no. El presidente es dueño de la agenda política y mediática. Los gobernadores de oposición, que en los tres últimos sexenios le impusieron condiciones a Vicente Fox, Felipe Calderón y Peña Nieto, hoy son minoría. Perdieron influencia en el Congreso y López Obrador les cerró las llaves de la Secretaría de Hacienda. Con 22 estados en poder de Morena, cinco del PAN, dos del PRI y dos de Movimiento Ciudadano, la sucesión presidencial de 2024 parece de trámite. E4

Estados gobernados por partido

Morena 22

PAN 5

PRI 3

MC 2


Alternancia política y visos de justicia en los estados

Casos de corrupción en Hidalgo y Tamaulipas serán denunciados, advierten Villarreal y Menchaca. Santiago Nieto investiga

Mientras la coalición Va por México navega a la deriva y entre barruntos de tormenta amenaza naufragar, en Morena hay fiesta. Julio Menchaca reunió a los presidenciables Claudia Sheinbaum, Marcelo Ebrard y Ricardo Monreal en su toma de posesión como primer gobernador no priista de Hidalgo. El morenista superó a la candidata del PRI, PAN y PRD, Carolina Viggiano, en proporción de dos a uno en los comicios de junio pasado. Ganar todos los distritos reflejó el hartazgo de los hidalguenses de una clase política venal y caciquil después de haber tenido mandatarios de la talla de Javier Rojo Gómez. El exgobernador Jesús Murillo está en prisión por el caso Ayotzinapa.

«(En Tamaulipas) existen temas vinculados con corrupción en el sector salud, comunicación social y obra pública».

Santiago Nieto

Con la alternancia en Hidalgo puede llegar también la justicia. Menchaca nombró fiscal general del estado a Santiago Nieto, quien, desde la Unidad de Inteligencia Financiera de Hacienda, se convirtió en el zar anticorrupción del presidente López Obrador. Los casos de Emilio Lozoya (Pemex), Alonso Ancira (AHMSA), Rosario Robles (Sedatu) y del abogado Juan Collado lo demuestran. Como titular de la Fiscalía Especializada para la Atención de los Delitos Electorales (2015-2017), consiguió una orden de captura contra el exgobernador de Chihuahua, César Duarte, por financiamiento ilegal al PRI, e investigó el escándalo Odebrecht que involucra al expresidente Peña Nieto.

Menchaca se comprometió «a combatir los abusos» y a «desmantelar el sistema que nos ha lastimado a todos». Dijo que tras de 93 años de Gobiernos priistas, los hidalguenses decidieron cambiar de rumbo «para terminar con las malas prácticas de un sistema que ya se fue para siempre». La suerte del PRI se echó antes de la postulación de Carolina Viggiano, impuesta contra la voluntad del entonces gobernador Omar Fayad. Sin embargo, la derrota pudo haber sido menos humillante con otro candidato.

El también morenista Américo Villarreal asumirá la gubernatura de Tamaulipas el 1 de octubre. En el sexenio de Francisco Javier García Cabeza de Vaca (PAN), la deuda directa del estado se incrementó en 33% con lo cual alcanza ya los 15 mil 700 millones de pesos (en Coahuila, el moreirazo ronda los 40 mil millones). Asesorado por Santiago Nieto, quien forma parte de su equipo de transición, Villarreal interpondrá acciones legales contra su predecesor. En Campeche, Layda Sansores ha exhibido las corruptelas del exgobernador Alejandro Moreno, líder del PRI en capilla.

Nieto declaró a Joaquín López-Dóriga que en Tamaulipas «existen elementos muy importantes en temas vinculados con corrupción en el sector salud, comunicación social, obra pública». Además «Hay mucha gente que denuncia que durante este Gobierno perdieron sus propiedades de manera ilícita. (…) Todo apunta a García Cabeza de Vaca como el orquestador de este tipo de delitos. Vamos a presentar las pruebas (…) ante la instancias competentes. (…) La posición del gobernador electo Américo Villarreal es que se tiene que reinsertar el Estado de derecho (…) doblegado en la administración de Cabeza de Vaca».

En Tamaulipas, como en Hidalgo, Oaxaca y Quintana Roo, los ciudadanos votaron por la alternancia. Coahuila y Estado de México, donde el PRI gobierna desde 1929, irán a las urnas el año próximo para elegir a los sucesores de Miguel Riquelme y Alfredo del Mazo. Por ser las elecciones previas a las presidenciales de 2024 tienen un interés particular y las colocará bajo los reflectores. La prioridad de AMLO, Morena y la coalición Va por México —si sobrevive— no es otra que ganar. Los medios de comunicación del país seguirán los procesos paso a paso. El PRI se juega el todo por el todo. E4

Torreón, 1955. Se inició en los talleres de La Opinión y después recorrió el escalafón en la redacción del mismo diario. Corresponsal de Televisa y del periódico Uno más Uno (1974-81). Dirigió el programa “Última hora” en el Canal 2 de Torreón. Director del diario Noticias (1983-1988). De 1988 a 1993 fue director de Comunicación Social del gobierno del estado. Cofundador del catorcenario Espacio 4, en 1995. Ha publicado en Vanguardia y El Sol del Norte de Saltillo, La Opinión Milenio y Zócalo; y participa en el Canal 9 y en el Grupo Radio Estéreo Mayrán de Torreón. Es director de Espacio 4 desde 1998.

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