Rebelión en secciones 35 y 38 del SNTE sacude al «moreirato»

En la primera elección con voto libre y secreto, los maestros de Coahuila castigan más de 18 años de abusos, desfalcos y uso político del sindicato por parte del clan de los Moreira. La nueva dirigencia —identificada con Morena— está a prueba

Sección 38, ¿hacia el rescate y la reconstrucción?

10 Compromisos para la atención y defensa de los derechos de los agremiados a la Sección 38

El imperio de los Moreira se tambalea. El pasado 9 de diciembre, en la primera elección de voto universal, libre y secreto para elegir a su dirigencia sindical, los maestros de Coahuila se rebelaron contra el clan que durante 18 años desfalcó las tres secciones locales del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE) para financiar las carreras políticas de los hermanos Humberto, Rubén, Carlos y Álvaro Moreira.

Se trató de la primera vez en la historia del sindicato más fuerte de Latinoamérica que sus miembros pudieron acudir a las urnas para elegir libremente a los dirigentes de las Asambleas Delegacionales Electivas (ADE).

El resultado en Coahuila fue una bofetada para Carlos Moreira Valdés (CMV), autodenominado «líder moral» de los maestros, pues sus candidatos perdieron por amplia diferencia en dos de las tres Secciones del SNTE que hay en la entidad: la 35 (municipios de Laguna de Coahuila y de Durango) y la 38. En la Sección 5, se impuso la planilla afín a los Moreira («Unidad institucional», encabezada por Everardo Padrón García), con lo que ésta se convierte en el último bastión del moreirato en el magisterio.

El duro golpe que recibieron los Moreira en su propia cancha no pasó desapercibido para la prensa nacional (Reforma lo abordó en su portada del 10 de diciembre bajo el título «Quitan a los Moreira el SNTE de Coahuila»), sobre todo porque las victorias de Arturo Díaz González de la planilla «Agremiados Laguna Unidos» en la Sección 35 y de Isela Licerio Luévano de «Aliados por el rescato de la Sección 38» fueron celebradas por el subsecretario de Seguridad Pública y aspirante de Morena a la gubernatura Ricardo Mejía Berdeja.

«Felicito a mis amigos Mtra. Icela Licerio y Mtro. Arturo Díaz (…). Su triunfo es el comienzo de una nueva historia para el magisterio en #Coahuila y el principio del fin del #Moreirato», escribió Mejía en Twitter (09.12.22), donde compartió fotos con ambos.

En un video publicado en Facebook, el hombre fuerte del presidente Andrés Manuel López Obrador (AMLO) en el estado celebró que los maestros se hayan «sacudido un cacicazgo corruptor de más de 18 años de los Moreira, y en especial de Carlos Moreira». Para el funcionario este triunfo demuestra «que a pesar de la guerra sucia, (…) de las marrullerías, como las que todos los días hace el gobernador Miguel Riquelme (…) cuando un pueblo quiere la libertad y se decide, hace el cambio».

En su mensaje denuncia además que «es el propio Manolo Jiménez, el delfín del moreirato corruptor, quien se la pasa haciendo llamadas para decir que tal o cual persona va a ser el representante de la 4T en Coahuila, (…) queriendo vender temor, ofreciendo cargos públicos (….) Ya párale con tus trampas, Manolo Jiménez, (…) deja que la gente siga sus procesos en calma, la hora va a llegar para Coahuila, viene el cambio».

Fue la apoteosis de lo que parecía la crónica de una caída anunciada. Sin embargo, tres días después (12 de diciembre), Morena daba a conocer que sus encuestas internas favorecían la candidatura a gobernador del senador y empresario Armando Guadiana Tijerina, con lo que el partido de AMLO parece haber entregado el estado al PRI.

La «rebelión» magisterial no solo acaba con los sueños de Carlos Moreira de convertirse en dirigente nacional del SNTE, sino que abre la puerta para que se transparenten las finanzas y se desahoguen las investigaciones en torno a desfalcos millonarios en los fondos de Ahorro, Pensiones, Servicio Médico, Vivienda y Seguro del Maestro, que desde hace años están en bancarrota (luego de haber sido ejemplos de calidad a escala nacional).

La Auditoría Superior del Estado (ASE) ha señalado multimillonarias irregularidades en las secciones locales del SNTE, lo que ha derivado en denuncias ante la Fiscalía Especializada en Hechos por Delitos de Corrupción del estado, por las cuales el exsecretario general de la Sección 5, José Luis Ponce Grimaldo (2016-2020), fue vinculado a proceso. Dos amparos mantienen a Ponce Grimaldo fuera de la cárcel, pero todos los caminos de la corrupción llevan a CMV.

Por lo pronto, el hartazgo de las bases ha abierto las puertas para el cambio y la renovación del magisterio coahuilense, pero la victoria puede ser pírrica, pues dentro de las planillas ganadoras hay personajes ligados al moreirato.

De profes y maestras

El 20 de diciembre de 2007, el clan Moreira dio una demostración de poder que bien pudo ser un adelanto de la inédita sucesión gubernamental entre los hermanos Humberto y Rubén. Con la bendición de la entonces presidenta del SNTE, Elba Esther Gordillo, Carlos Moreira entregó la dirigencia de la Sección 5 (que agrupa a los maestros de nómina federal) para asumir el mismo cargo en la Sección 38 (maestros estatales).

Un día antes, al enterarse de que Carlos dirigiría la Sección 38, los reporteros le recordaron que él había negado que aspirara a tal puesto. «Lo que pasa es que ustedes plantearon mal la pregunta. Me preguntaron si en ese momento aspiraba a la Sección 38 y, en ese momento yo no quería, pero hoy sí», dijo con ironía (Proceso, 20.12.07).

Y tal como sucedió con su hermano Humberto (quien no era el candidato favorito del gobernador Enrique Martínez en las elecciones estatales de 2005), Carlos le comió el mandado a Benito Parra, quien no solo era el favorito del secretario Alejandro Campos a sucederlo, sino a quien «por tradición» le tocaba el puesto, por ser el tesorero de la organización gremial. Tanta fue la sorpresa, que los colaboradores de Campos y Parra se negaron a admitir los cargos que ofreció Moreira y renunciaron a sus puestos sindicales.

«Recordemos que Carlos desde la Sección 5 había organizado las redes magisteriales que en telaraña apuntalaron la precampaña de Beto (Humberto) y eran los tiempos en que la pregunta del día era: ¿Ya lo viste con Rubén? Sobornando delegados con horas-clase completas, a otros con amedrentamientos y a los más habladores con carteras de menor importancia se formó el cuadro que se posicionó en el sindicato hasta el final de los tiempos», escribe Orestes Gómez en su columna titulada «Sección 38, crónica de una conjura» (Vanguardia, 11.09.22).

En la misma conferencia de prensa en la que informaba el salto de dirigencia, Carlos expresó su interés por ocupar la tesorería del Comité Ejecutivo Nacional (CEN) del SNTE, pero su sueño real siempre ha sido la dirigencia nacional del sindicato.

En la Sección 5, Carlos entregó la batuta a Elsa María Martínez, quien había iniciado su carrera sindical junto a él en la misma corriente política magisterial: la de la maestra Elba Esther Gordillo.

Otra figura de ese grupo es el profesor Alfonso Cepeda Salas, nacido en Arteaga, quien es hoy el secretario nacional del SNTE. Sin embargo, analistas coinciden en que Cepeda se dirime hoy entre la lealtad a los Moreira y a AMLO.

«Tras contar con el apoyo total del presidente Andrés Manuel López Obrador, para impedir el retorno de Elba Esther Gordillo al SNTE, el actual dirigente nacional del magisterio, corre el riesgo de que su buena suerte se esfume ante la sucesión al Gobierno de Coahuila en el 2023, donde los Moreira han afincado su poder local a través del control que su hermano Carlos Ariel ejerce sobre las secciones magisteriales del estado; a Cepeda lo unen fuertes lazos de amistad y de negocios con el poderoso clan que echó abajo la Reforma Eléctrica en San Lázaro, por lo que ante la imposibilidad de combatirlo y apoyar a Morena, su alianza con la 4T estará en entredicho», señala una nota de I. León Montesinos para Cananea TV (10.07.22).

Sin la venia de la dirigencia nacional ni el poder de las Secciones 38 y la 35 —y acorralado en la 5 por las denuncias de corrupción—, Carlos puede despedirse de sus sueños de dirigente nacional. Y no sería mala idea que se ponga a rezar para que Ponce no lo involucre en la trama de desvíos en el magisterio durante los Gobiernos de Humberto y Rubén, como sí lo han hecho algunos de los colaboradores del exdirigente de la Sección 5.

En febrero de 2020, Juan Antonio Rivas Sánchez, extitular del Sistema de Fondo de Ahorro de la Sección 5 del SNTE, reconoció en un video publicado en Facebook que por órdenes de Ponce firmó cheques para gastos en table dance, viajes familiares y regalos. Meses más tarde, en julio de ese año, se reveló que Bertha Patricia, una mesera del bar VIP de Saltillo, recibió entre 2018 y 2019 cheques del mismo fondo por más de 1.7 millones de pesos, por prestar servicios no especificados a profesores cercanos a Ponce Grimaldo.

La estafa magisterial

Cabe recordar que Humberto Moreira formó parte de las violentas luchas sindicales que se dieron a finales de la década de 1980, como parte del «Movimiento Reivindicador de la Institucionalidad de la Sección 38 del SNTE», que pugnaba por una elección democrática de secretario general (Proceso, 20.12.07).

Esto, después de que el dirigente seccional Eliseo Loera Salazar muriera en 1988 en condiciones extrañas, al igual que el profesor Antonio Chaires Costilla y otros líderes contestatarios, quienes formaban parte del «grupo de los reivindicadores»

«Humberto Moreira jugó un papel importante al lado del extinto Chaires Costilla, por lo que, a su muerte y la intervención de comité nacional a favor del grupo que usurpó la dirigencia, el actual gobernador fue expulsado de la Sección 38 del SNTE, donde hoy su hermano Carlos tomó posesión como secretario general», recuerda Proceso.

Ya en la 38, Carlos se sirvió con cuchara grande. «Pronto se dio cuenta el mentor (Carlos) que la principal fuente de recursos no eran las cuotas jugosas que recibía de los mentores y del Gobierno estatal, sino el fondo de pensiones del magisterio; y alegando que las anteriores administraciones lo habían dejado insostenible, recibió un préstamo jugoso de su hermano gobernador (Humberto), registrado en el hielo y así apuntaló el mayor saqueo del que se tenga memoria en la historia de Coahuila», continúa Gómez.

El columnista recuerda que para 2010, «el desvío de recursos de un fondo grupal a uno personal era del 66% del patrimonio, lo que comprometía el pago de pensiones a partir del siguiente año. Una vez ungido el otro hermano (Rubén) al Gobierno y percatándose del exceso del saqueo, se ordenó al gobernador Torres impulsar una nueva ley de pensiones a fin de recuperar fondos de inmediato, pero al enterarse la base magisterial se amenazó al candidato de retirarle el apoyo y se dio marcha atrás a la ley a través de su abrogación».

Para sucederle en la 38, Carlos eligió a su chofer Xicoténcatl de la Cruz, quien asumió la dirigencia en marzo de 2016, en medio de denuncias de desfalcos en el Servicio Médico y otras instituciones magisteriales.

A las irregularidades por 1,300 millones de pesos detectadas por la ASE de 2012 a 2016 en las Secciones 5 y 38, se suman otras por 418.4 millones de pesos de la cuenta pública de 2019 que corresponden al período de Xicoténcatl de la Cruz García, quien —dicho sea de paso— asignó a su hermano un puesto con un salario de 113 mil pesos mensuales.

«Hay una liga entre el hoy llamado líder moral de la Sección 38 y los sucesores, ya que desde 1985, año en que fueron expulsados de la BENC por conducta inapropiada, Carlitos y Xicoténcatl lucharon por ingresar a la normal de Parras sin éxito, para después encontrar arropo como profes de grupo en la Sección 5. Quién imaginaría que tiempo después se convertirían en amos y señores de una sección magisterial amodorrada y amedrentada que los ha hecho millonarios por generaciones», concluye Gómez.

Hoy, la ASE y la Fiscalía Anticorrupción tienen en la mira a los incondicionales de Carlos. Es cierto: el «inicio del fin del moreirato», al menos en el magisterio, ya inició. E4

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Sección 38, ¿hacia el rescate y la reconstrucción?

Las planillas que compitieron en la pasada elección incluyeron a miembros que en algún momento tuvieron relación con Carlos Moreira. La base magisterial espera que los nuevos dirigentes cumplan con los compromisos que firmó la secretaria Isela Licerio

Gustavo García Torres*

El pasado 9 de diciembre, por fin se llevó a cabo la elección de la Directiva de la Sección 38 del SNTE. Perdió la planilla encabezada por Sergio Ramírez. Perdió Carlos Moreira después de 15 años de ejercer un cacicazgo en la Sección, a donde llegó impuesto por Elba Esther Gordillo Morales, y en la que se mantuvo con el apoyo posterior de Juan Díaz de la Torre y de Alfonso Cepeda Salas.

Durante casi dos décadas de dominio en las secciones 5, 35 y 38, Carlos Moreira contó primero con la complacencia de Enrique Martínez, exgobernador de Coahuila (asumió la Secretaría General de la Sección 5 en 2004, cuando todavía EM era titular del Ejecutivo), recibió luego el apoyo de sus dos hermanos, Humberto y Rubén, cuando gobernaron el estado, y fue respaldado en todo por el actual gobernante, Miguel Riquelme.

Colaboradores de Carlos Moreira en distintos períodos, en los últimos años pasaron a formar bloques opositores, bien por diferencias de ell@s con el cacique o porque él mismo les segregó de su círculo cercano. Es el caso de integrantes de las dos planillas opositoras que contendieron en la pasada elección, vinculada una («Ruta 11») a Maestros por México y a Elba Esther Gordillo, aliada de los Moreira, y la otra, la planilla ganadora, «Aliados por el Rescate de la Sección 38» (que voces magisteriales relacionan con Alfonso Cepeda), encabezada por Isela Licerio Luévano y conformada por 3 expresiones (La Dama está lista, Auténticos 38 y Por uno de nosotros), integradas por miembros que en algún momento formaron parte, o tuvieron relación, vínculos de colaboración y cercanía en distintos grados con Carlos Moreira y el grupo político que desde 2005 detenta el poder en Coahuila, antecedente que suscita dudas sobre su desempeño futuro y que tendrán que desterrar mediante una gestión en favor de los agremiados.

Quienes integran ahora la Directiva Seccional, de un corto tiempo a la fecha enarbolaron banderas de cambio. Para inspirar confianza, dieron un paso más, firmaron compromisos que la base magisterial espera que cumplan.

Entre esos compromisos destaca el de «Ejercer con dignidad la representación sindical y salvaguardar la independencia y autonomía de la Sección 38, evitando toda subordinación al Gobierno o a partidos políticos como el PRI, el PAN, MORENA o cualquier otro, así como a exdirigentes y facciones sindicales que pretendan seguir lucrando política y económicamente con el SNTE».

Varios factores hicieron posible el resultado alcanzado. Destaco en primer lugar la concientización de la necesidad del cambio, propiciada por el movimiento pro defensa de la seguridad social, sostenido por varias agrupaciones, principalmente la Coalición de Trabajadores de la Educación.

No es exagerado decir que gran parte de los 9,861 votos que obtuvo la oposición en esta contienda (7,301 de la Planilla ganadora, más 2,560 de la que quedó en tercer lugar) provienen del nutrido grupo de trabajadores activos y pensionados que participan o simpatizan con el movimiento magisterial que ha dado grandes batallas.

Aparejado con lo anterior, como acicate: el empeñoso afán de la dupla Moreira-Riquelme que hizo todo para perder, desde potenciar su acción depredadora del patrimonio de los maestros, hasta exacerbar su enconada represión y persecución judicial a los integrantes del movimiento magisterial en el que participan los grupos disidentes de la 38

Como colofón, el candidato de Moreira-Riquelme ofertaba en campaña que requeriría más aportaciones a los trabajadores para seguridad social e insistía en imponer copagos para recibir atención médica, y otras barbaridades por el estilo. Mayor cinismo y burla, imposible.

La Alianza de tres expresiones opositoras fue posible gracias al acuerdo de sus líderes. Si bien dos de las expresiones fueron renuentes, el pragmatismo final hizo posible conformar la planilla «Aliados para el Rescate de la Sección 38». La nueva directiva, encabezada por Isela Licerio Luévano, representa una posibilidad, una oportunidad para reencauzar el rumbo.

Para salir del desastre ocasionado por el grupo que mantuvo secuestrada a la Sección 38 durante 15 años, era urgente elegir una dirigencia sindical que no solo se ofertara como diferente, sino que dejara constancia escrita y pública de su determinación para llevar a cabo una óptima y eficaz gestión sindical en favor de todas y todos los integrantes de la organización sindical. Por ello, un numeroso grupo de convocantes les requirió la firma de «10 Compromisos para la Atención y Defensa de Derechos de los Agremiados a la Sección 38 del SNTE».

A diferencia de la desdeñosa respuesta del candidato de Carlos Moreira («No podemos firmar un documento que contradice nuestros principios»), Isela Licerio Luévano sí firmó los compromisos en nombre de ella y en representación del equipo que encabeza. Acciones, gestiones y decisiones esperadas están ahí plasmadas en términos concretos. Cumplir o no cumplir será responsabilidad política, ética y moral de la nueva Dirigencia.

Entre los 10 compromisos firmados por Isela Licerio, el segundo se refiere a «desarticular relaciones comerciales y el tráfico de influencias de funcionarios o dirigentes sindicales que privilegien intereses de corporaciones médicas particulares». Es de conocimiento público que beneficiarios de esas relaciones comerciales, por vía de contratos de subrogación de servicios médicos, son familiares del actual dirigente nacional del SNTE. No es probable que esos contratos estén fuera de la legalidad, desde luego. Lo cuestionable es el marco ético del asunto y su incidencia en la merma de la infraestructura y equipamiento de las clínicas magisteriales, cuyo mejoramiento tendría que pasar precisamente por reactivar el funcionamiento de sus instalaciones, para brindar ahí los servicios y no tener que erogar grandes cantidades por su subrogación. Veremos el alcance de su cumplimiento.

Poder compartido

Algunos periodistas de medios locales y voces magisteriales han sugerido que Isela Licerio sería el «plan B» de Carlos Moreira. Aluden a las evidencias de la cercanía que hasta hace unos pocos años había entre ellos, o refieren su posición al lado del grupo oficialista y del Gobierno cuando los grupos disidentes eran echados a golpes del Congreso y acusados de motín en el 2018, o su distanciamiento de la lucha librada por aquellos en los últimos 11 años. Pero Isela ha venido declarando que su deslinde de los Moreira y de Riquelme es real y definitivo, y que su trabajo será en favor de los agremiados. Esperemos que así sea. El primer año de su gestión será significativo en ese sentido.

No fueron pocas las voces magisteriales que consideraron también a Francisco Gaytán como el «plan C», por su vínculo con «Maestros por México» y Elba Esther Gordillo, aliada de Carlos, y por su cercanía con el grupo Moreira desde los tiempos del «movimiento reivindicador», cuando Carlos quiso por primera vez hacerse del control de la 38 y las instituciones de seguridad social, pero salió derrotado.

Desde entonces Gaytán aportó mucho trabajo en favor de las campañas políticas del PRI y en particular de los Moreira, pero años después ha venido manifestando también su deslinde. Obtuvo apenas el 16% de los votos en esta ocasión. Hoy tiene la opción de gozar su jubilación o integrarse a la lucha por la reivindicación de los derechos laborales y de seguridad social del magisterio.

Por norma estatutaria, de acuerdo con el principio de representación proporcional, le corresponden a la planilla que obtuvo el segundo lugar 8 carteras en el Comité Ejecutivo Seccional. Serán para la planilla del grupo Moreira, que alcanzó el 38.38% en la contienda; un dato preocupante porque significa que 6,142 miembros todavía quieren seguir bajo el yugo opresor.

La pregunta del día es si los encargados de aquellas ocho carteras apoyarán el cumplimiento de los compromisos firmados por la Secretaria General, para beneficio de los trabajadores, ¿o se dedicarán a obstruirlos porque van «en contra de sus principios»?

• Aliados por el rescate dela Sección 38. Primer Lugar. 45.62%
• Unidad Institucional 38. Segundo Lugar. 38.38%
• La planilla ganadora compartirá ocho carteras con el segundo lugar

*El autor es integrante de los colectivos Magisterio en Acción por la Seguridad Social, Sección 38 (MASSS38) y la Coalición de Trabajadores de la Educación Pública de Coahuila.

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10 Compromisos para la atención y defensa de los derechos de los agremiados a la Sección 38

1. Ejercer con dignidad la representación sindical y salvaguardar la independencia y autonomía de la Sección 38, evitando toda subordinación al Gobierno o a partidos políticos, así como a exdirigentes y facciones sindicales que pretendan seguir lucrando con el SNTE.

 2. Desarticular los vínculos y relaciones comerciales que mediante el tráfico de influencias de funcionarios o dirigentes sindicales privilegien los intereses de corporaciones médicas particulares, prestadores de servicios, proveedores y otros tipos de empresas.

3. Realizar auditorías durante los primeros 6 meses de gestión a los salones, casas, centros recreativos, Fondo de Ahorro y a la Secretaría de Finanzas de la misma Sección 38, respecto al uso y destino de los recursos en los últimos 15 años, y presentar las denuncias y demandas procedentes.

4. Gestionar que el Instituto del Servicio Médico cumpla a cabalidad con lo establecido en la Ley respectiva, para asegurar y garantizar a los agremiados:

• Atención médica inmediata, integral, completa y de calidad.
• Contar con los suficientes médicos generales y de especialidad.
• Ofrecer medicamentos y tratamientos completos y oportunos que les sean prescritos, o en caso de no haberlos, reembolsarles inmediatamente el costo de la compra.
• Eliminar la burocracia y las acciones dilatorias en el trámite para la realización de estudios, tratamientos, cirugías y otros servicios.

5. Exigir al Gobierno del estado, a la UA de C, a la UAAAN, al FOVI, DIPETRE, Seguro del Maestro y Servicio Médico, que en un plazo no mayor a 6 meses efectúen el pago de las aportaciones que adeudan por distintos conceptos de seguridad social.

6. Efectuar el pago, en un plazo no mayor a 60 días de las Pólizas del Seguro y Retiro que se deben a más de 600 pensionados desde hace 6 años, y en adelante efectuar ese pago a cada pensionado dentro de los siguientes 30 días a la fecha de su retiro como máximo.

7. Exigir que el Gobernador del estado, el Fiscal General y el Fiscal Anticorrupción presenten resultados de las investigaciones sobre las denuncias penales de la Auditoría Superior del Estado, respecto al daño de más de 1,300 millones de pesos a las instituciones de seguridad social del magisterio de 2012 a 2016; que se finquen responsabilidades y se restituya lo sustraído.

8. Realizar las siguientes acciones relativas a cuentas individuales:

• Realizar en un plazo máximo de 6 meses, una revisión exhaustiva para analizar su concordancia con los principios constitucionales y en su caso promover la armonización legislativa correspondiente; validar los cálculos actuariales que originaron el incremento más reciente a las aportaciones de los trabajadores, y exigir que les entreguen informes periódicos sobre rendimientos y estados de cuenta.
• Exigir el pago completo e inmediato del capital e intereses ordinarios y moratorios por los recursos de las Cuentas Individuales utilizados para el pago de pensiones del esquema solidario; exigir que en forma inmediata se suspenda su utilización para ese fin y demandar que el Gobierno aporte los recursos para completar las pensiones correspondientes de acuerdo con el Artículo 51 de la Ley vigente.

Presentar una iniciativa para derogar el artículo 22 de la Ley de Pensiones para evitar que se utilicen los recursos de las cuentas Individuales para el pago de las Pensiones del esquema solidario.

9. Realizar, en los primeros 6 meses de gestión, asambleas delegacionales y foros de consulta a fin de promover la democracia participativa.

10. Realizar una consulta, una vez transcurrida la mitad de nuestra gestión, para preguntar a los agremiados si aprueban o no los resultados obtenidos, y en caso de no favorecernos, presentar la renuncia a los puestos en la Directiva Sindical.