¿Te imaginas tener 17 años y que tu vida no dé uno sino varios giros de 180 grados a gran velocidad, al día siguiente de tu cumpleaños, y eso cambie el panorama de tu mundo hasta ahora?
Ahora pregunto: ¿Qué se les viene a la mente cuando escuchan el nombre de Octavio Paz? Tal vez apareció en su mente un laberinto. ¿Y si les pregunto por Rosario Castellanos? Quizá una muerte trágica. ¿Sor Juana? Pudiera ser hombres necios andando por la calle. ¿David Huerta? ¿Enriqueta Ochoa? Todas y todos ellos además de ser referentes de la literatura mexicana son fuego en la fogata de la poesía.
Mi abuela me decía que un hombre que escribe era atractivo. Ahora imagínate un hombre el cual ¡escribe poesía! Un género literario que algunos consideran complicado, otros se atreven a pensar que está muriendo, de ser así Rodolfo Naró es sin duda uno de sus grandes defensores y promotores.
Nacido en Tequila, Jalisco. Becario del Fonca en la disciplina de novela. Su obra poética está reunida en obras como Los días inútiles (1985-1995), Lo que dejó tu adiós (1995-2005) y Elegir el fuego (2005-2015). Como novelista es autor de El orden infinito; Cállate niña, además de contar con libros infantiles Paganino y El misterio del colibrí. (Aquí es donde googleamos la obra para irla poniendo en el wishlist).
Rodolfo Naró es un poeta que escribe primero para sí mismo, sobre lo que va padeciendo y las dudas que le surgen conforme pasan los años: dudas y cuestionamientos. Naró es un hombre generoso abierto a dar entrevistas para presentar su obra, pero también para tener una conversación sobre todo el proceso.
Un corazón para Eva llegó a la repisa de las librerías en 2018, un escrito donde se nos presenta a Eva, una joven de 17 años, ¿te acuerdas cómo eras a los 17?
La protagonista nos presenta desde sus primeras páginas algunos rasgos de su personalidad, de su entorno familiar y cómo ello cambia por la aparición de una enfermedad como lo es la epilepsia.
Sobre el proceso de creación, Rodolfo comparte a quien escribe que fue un reto escribir para las y los jóvenes, pero él siempre ha buscado salir de su zona de confort. Atreviéndose a dos cosas, abrir el corazón de su casa para contar una historia muy cercana a su familia y además de ¡irse a convivir con adolescentes! Para con ello hacer un estudio de campo y no creer que el adolescente así piensa o habla sino tener el proceso de análisis muy fino y trabajado. Esto algunos podrán decir: pues eso hacen todos, ¿no? La verdad es que la historia de las y los escritores nos ha mostrado que en ocasiones hay quien se atreve a escribir de cosas que no conoce.
Un corazón para Eva, una historia de amor familiar, de amor de juventud y de amor a la vida. Es un libro no solo para jóvenes —me atrevería a decir— que es un libro para toda la familia, para disfrutarlo en conjunto, una excusa perfecta para dialogar, algo que en muchas casas se necesita.
Para quienes como uno se quede con ganas de saber más sobre Eva, Rodolfo nos comparte que sabremos de ella en próximas fechas, debido a que tiene una cita programada para finales de este año.
Naró es un ejemplo de que es sano renovarse, experimentar con áreas que a lo mejor sentíamos lejanas. Además de quienes se acerquen a su poesía les prometo más de un suspiro.
La literatura como una de las bellas artes se encuentra abierta para todo aquel que se atreva a disfrutarla, conocerla, dejarse atrapar. ¿Te atreves?
