Manolo Jiménez, el alcalde de Saltillo será el próximo candidato para el Gobierno del Estado, con coalición o sin coalición, aunque los panistas y perredistas le apuestan a la coalición en busca de un hueso que les permita a los «bien portados» ser tomados en cuenta para el próximo gabinete que pueda conformar el futuro mandatario.
Entre ellos figuran dos: Mary Thelma Guajardo, fiel aliada de los tricolores en Coahuila a lo largo de los años; disciplinada y dispuesta a todo por no dejar esta cercanía con la ubre gubernamental y, por supuesto, Marcelo Torres Cofiño, quien sigue preocupado más por López Obrador que esta muy lejos de sus altavoces, en lugar de apurarse por el avance de su cuate Luis Fernando Salazar; quizá también tiene esperanza en aquel partido para volver a la palestra estatal. Nunca fue el líder del congreso que la oposición deseaba, le quedó grande, muy grande el rebaño legislativo y fuera de campaña solamente medio apoyó al Gobierno de Jorge Zermeño para guardar las apariencias, a pesar de ser una administración que trabajó con lo que pudo y hasta donde pudo. Luego entonces, Manolo y sus asesores ¿podrán confiar en ellos?
Sí con la perredista, pero no con el desteñido panista, que más bien trabaja como un oportunista chapulín.
Pero aún es muy temprano para hablar de esos temas, ¿no creen? Manolo ya cerró la tiendita, ya dijo que terminó de cumplir; aunque diciembre también cuenta. Esto es como la pelota, se termina hasta que caiga el out número 27, antes no.
Aunque nos deja la ciudad funcional, quienes rodean a Manolo lo aventaron a montar un toro bravo antes de tiempo, el 2 de enero hubiera sido más elegante. Él sabe que lo es, sin duda, entonces debió guardar las formas. Le roba cámara al gobernador y le roba cámara al Congreso y a los próximos alcaldes. Repito y así lo creo, no por una intención personal, sino por un asesoramiento intranquilo y temeroso. Luego entonces, el que pega primero pega dos veces.
Pero no debieron lanzar el «cumplimos» antes de tiempo, las vialidades están cada vez más congestionadas en las horas pico, la falta de señalamientos están provocando accidentes en muchas partes de Saltillo. Y eso también es seguridad. Si llegan los fríos deberá tener un plan quirúrgico para que no se desborden los albergues, y aunque nos duela a los ciudadanos, se debe imponer el reglamento de tránsito, mucha gente prefiere eso a que anden conductores como locos por las calles de la ciudad.
Definitivamente Manolo es un político bien intencionado, que sabe que la edad no tiene mayor importancia. Ahí está Samuel García en Nuevo León imponiendo un nuevo estilo de gobierno adecuado y adaptado a su personalidad. Eso es lo que deben hacer los que «cuidan a Manolo», darle un posicionamiento con base en su personalidad, porque la gente ya no sabe si es medio ranchero, si es medio fresa, si es estudioso o que es, ya el tiempo lo dirá.
la ciudad se mantuvo con buenos indicadores hasta el final de la administración de Jiménez Salinas, indicadores que la mayoría desconoce. Ya sea en los métodos utilizados, o en las mediciones reflejadas, pero aun así, Saltillo se ve ante los demás como una buena ciudad.
La ciudad que entregará Manolo a ChemaF tiene muchas áreas de oportunidad que seguramente el exrector ya las contempla. Ya solo queda lo que resta de diciembre, para empezar a observar el manejo que hará ChemaF de la ciudad, seguramente veremos muchos cambios y la gente espera que sean de fondo. E4